El brigada Sergio Sobrino y la guardia civil Mónica
Falgueras se han clasificado para el Ironman de Hawái
Los resultados obtenidos
por los militares españoles superaron
las expectativas de los
organizadores. «Dada la dureza
de la prueba, a la que se unió
un fuerte viento, ya hubiera
sido un resultado satisfactorio
que los cuatro deportistas españoles
hubieran finalizado. Así
que han superado con mucho
nuestras previsiones al haber
quedado el brigada Sobrino en
octavo puesto y la guardia civil
Falgueras, segunda de su grupo
de edad», puntualiza el coronel.
En Hawái, los dos deportistas
representarán al Ministerio de
Defensa, vestirán equipaciones
oficiales y estarán subvencionados
La guardia civil Mónica Falgueras durante la prueba de
por el Departamento.
El campeonato militar celebrado en
Lanzarote solo ha sido el comienzo ya
que el Consejo Superior del Deporte
Militar tiene varios proyectos para
esta disciplina. «El primero —señala
su secretario general— conseguir de la
empresa Ironman que los medallistas en
los campeonatos mundiales militares
clasifiquen automáticamente para Hawái,
de tal manera que podamos presentar
un equipo mundial militar». En
este caso, los atletas no participarían
representando a sus naciones sino al
deporte militar. Otras propuestas son
incorporar, para próximas ediciones,
deportistas militares discapacitados y
abrir una ventana para los veteranos.
Para poner en marcha el primer
Campeonato Mundial Militar de Triatlón
de Larga Distancia Titan Soldier, el
Consejo Superior del Deporte Militar
contó con la colaboración de la Federación
Española de Triatlón, el Club La
Santa y el cabildo de Lanzarote que le
apoyó institucionalmente y económicamente
con las suscripciones.
HAWÁI, UN SUEÑO
«Clasificarse para Hawái es un sueño
para todo atleta que le guste la larga
distancia», puntualiza el brigada Sobrino.
De 41 años y destinado en el Centro
de Cría Caballar de Mazcuerras (Cantabria),
ciclismo, en la que se siente más fuerte.
es un veterano en esta distancia
ya que ha participado en seis Ironman.
Su objetivo en Lanzarote era acabar la
prueba en menos de diez horas «pero las
condiciones meteorológicas, con mucho
viento, no me lo permitieron. Había momentos
en los que pensé en retirarme».
Al final, su tiempo fue 10:06.
Muy aficionado al deporte, el brigada
practica triatlón desde 2006, disciplina
a la que se aficionó tras
superar el curso de Educación
Física. Agradece el apoyo que
recibe de sus superiores para
poder compaginar su trabajo
con los entrenamientos lo que le
permite competir al más alto nivel.
De otra forma, sería difícil,
porque «primero soy militar y
luego deportista», señala.
Ocho son los Ironman que lleva
a sus espaldas la guardia civil
Mónica Falgueras pero nunca
había conseguido clasificarse
para Hawái. Lo había intentado
en varias ocasiones y siempre se
había quedado a las puertas. Y,
ahora, no se lo esperaba. «Tuve
una embolia pulmonar un mes
antes de la carrera de Lanzarote
así que no sabía hasta donde podía
llegar. Me centré mucho en la hidratación,
en la comida, y disfruté mucho
de la carrera. Mi sorpresa, cuando terminé,
fue ver que me había clasificado
para Hawái», explica. La guardia civil,
además, había sufrido un ictus en 2011
que no le dejó secuelas y del que se recuperó
muy rápido.
Destinada en la Guardia Civil de
Tráfico desde 2008, a sus 42 años quiere
seguir compitiendo «hasta que me
permita el cuerpo. El deporte es mi
modo de vida, programo mis vacaciones
pensando en los sitios donde puede
haber alguna prueba», afirma. Pero,
además de estar en buena forma física,
«hay que tener una buena cabeza. Es
lo fundamental para ser una atleta de
triatlón de larga distancia», añade.
La disciplina favorita de los dos
clasificados para Hawái, en la que se
sienten más fuertes, es el ciclismo. Con
la bicicleta tratarán de compensar el
tiempo que puedan perder en el agua
o durante la maratón y así conseguir
finalizar la carrera con un buen tiempo.
Aunque acabarla, ya sería un éxito
teniendo en cuenta que se enfrentarán
a una de las pruebas deportivas más
duras del mundo.
Elena Tarilonte
Fotos: CSDM
El brigada Sobrino —a la izquierda—
junto al sargento primero Domínguez.
Septiembre 2021 Revista Española de Defensa 45