del mundo, tenemos más del 70 por
100 de nuestra población vacunada
y, además, hemos sido los únicos que
hemos compartido la mitad de nuestra
producción de vacunas con el resto del
planeta». Y, la presidenta de la Comisión
afirmó que quizás lo más importante,
es que lo conseguido reafirma
quiénes somos y quiénes seguiremos
siendo en el futuro. Una actitud que es
y será la clave para reivindicar el papel
de Europa en el mundo.
«Este liderazgo económico y climático
—enfatizó Von der Leyen— refleja
un cambio en el orden internacional»
en el que el Viejo Continente reforzará
su capacidad de actuación y, para ello,
incentivará la Europa de la Defensa.
Borrell recomendó
crear una fuerza
europea de
intervención
rápida
UE— y después de que el próximo 16
noviembre se presente el documento
definitivo que regirá la nueva doctrina
de seguridad de la Unión, la Brújula
Estratégica. En él se establecerán las
amenazas, objetivos y directrices políticas
para el desarrollo de la defensa y
la seguridad europea a través de cuatro
áreas fundamentales: gestión de crisis,
desarrollo de capacidades, asociaciones
con terceros y resiliencia. «Ha llegado
la hora de que Europa pase al siguiente
nivel en su defensa», sentenció
la presidenta de la Comisión.
VOLUNTAD POLÍTICA
Von der Leyen quiso lanzar un firme
mensaje de optimismo y confianza en
el proyecto europeo. «Europa necesita
un alma, un ideal y la voluntad política
de alcanzarlo. Y en los últimos doce
meses hemos hecho realidad estas palabras.
Hemos vivido la mayor crisis
sanitaria en un siglo, la crisis económica
más profunda en décadas y la crisis
planetaria más grave de la historia,
pero creo que Europa ha salido reforzada:
hemos optado por mantenernos
unidos. Una sola Europa de la que
podemos sentirnos orgullosos porque
hemos cumplido ante Europa y el resto
La presidenta de la
Comisión expone
en el Parlamento
el informe sobre el
Estado de la Unión.
«Europa puede y, a todas luces, debe ser
capaz y mostrarse dispuesta a hacer más
y actuar por su cuenta», y argumentó
esta necesidad en tres razones principales:
en primer lugar, aportar estabilidad
a nuestra vecindad y a lo largo y ancho
de distintas zonas geográficas; en segundo,
la propia esencia de las amenazas
a las que nos enfrentamos —desde los
ataques híbridos a la ciberdefensa o la
escalada armamentística en el espacio—
que evolucionan rápidamente y exigen
respuestas inmediatas; y, en tercero, que
la Unión Europea es un proveedor de
seguridad único «y habrá misiones en
las que no participarán ni la OTAN ni
las Naciones Unidas y en las que la UE
sí que deberá estar presente. Sobre el
terreno, nuestros soldados operan codo
con codo con agentes de policía, juristas
y médicos, con trabajadores humanitarios
y defensoras de los derechos
humanos, con profesores e ingenieros.
Somos capaces de combinar la acción en
el ámbito militar, civil, diplomático y de
ayuda al desarrollo», dijo.
Eso sí, durante su discurso la presidenta
de la Comisión insistió varias veces en
que la colaboración y la cooperación con
los organismos internacionales (en especial
con la OTAN) seguirán siendo una
Octubre 2021 Revista Española de Defensa 57
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Philippe Buissin/Unión Europea