La ministra de Defensa señaló que el rescate ha mostrado la
calidad humana y la preparación de los militares españoles
fondos de cooperación españoles; y las
más de 1.400 actuaciones de desactivación
de explosivos.
Robles remarcó el «contenido humanitario
» de muchas misiones realizadas
por nuestras Fuerzas Armadas en
Afganistán, que permitieron la llegada
de ayuda humanitaria internacional; la
adecuación de infraestructuras de primera
necesidad para llevar luz y agua
a los hogares, creando una red de saneamiento
y prestando ayuda médica y
veterinaria; el apoyo directo e inmediato
a los más vulnerables con la construcción
de institutos de educación
secundaria, escuelas rurales, orfanatos
y colegios que facilitaron el acceso de
la población infantil a la educación; y
la mejora de la situación de las mujeres
y las niñas afganas. «Muchas de las
mujeres que llegaron a España —advirtió
la titular del Departamento— no
solamente hablaban español, sino que
decían que habían podido formarse y
tener derechos».
EVACUACIÓN
Refiriéndose a la operación de evacuación,
la ministra de Defensa indicó que
los planes se aceleraron al precipitarse
los acontecimientos. «A partir del 13 de
agosto —relató— la situación se deterioró
rápidamente en Kabul. A la ciudad
llegaron los talibanes el 15. Hubo
un colapso militar y político. El Gobierno
afgano, encabezado por su presidente,
se fue del país, y eso obligó a acelerar
todos los trámites que eran necesarios».
Se entró en la fase de evacuación urgente
de los españoles que quedaban,
que eran solo cinco, y de los afganos
que habían colaborado con las fuerzas
internacionales, junto a sus familiares.
El personal de la Embajada de España
en Kabul fue trasladado por las Fuerzas
Armadas estadounidenses a la base militar
del aeropuerto de Kabul.
En diez días, del 18 al 27 de agosto,
España rescató a 2.206 personas
(1.671 cooperantes de España, 21 de
Portugal, 333 de la UE, 131 de Estados
Unidos y 50 de la OTAN). Para
y la imposibilidad de lograr un sistema
político y social estable, el débil apoyo
de la población al Gobierno afgano, la
dificultad para combatir la corrupción
y, sobre todo, el rápido avance de las
tropas talibanes, no solamente reflejan
la fragilidad de los logros obtenidos y
ponen de manifiesto un drama humanitario,
sino que nos tiene que hacer
reflexionar a todos sobre el resultado
de esa misión».
Pese a ello, la ministra de Defensa
Algunos refugiados afganos descienden del avión en el que llegaron a la base de
Torrejón desde Islamabad (Pakistán), en la noche del pasado 12 de octubre.
destacó que la evacuación ha puesto de
relieve «la extraordinaria preparación,
la ejecución técnica, el compromiso
con la misión y la calidad humana»
de nuestras Fuerzas Armadas. «España
—añadió— ha demostrado una
importante capacidad de liderazgo en
la organización del centro europeo de
acogida, en su respuesta inmediata a
la evacuación y, sobre todo, en la solidaridad
y el compromiso con los derechos
y libertades proclamados en la
Declaración Universal de los Derechos
Humanos».
Santiago Fernández del Vado
Noviembre 2021 Revista Española de Defensa 19
Ricardo Pérez Hiruela/MDE
nacional
ello se realizaron diecisiete vuelos entre
Kabul y Dubái del avión A400M del
Ejército del Aire; once de Dubái a Torrejón
de Ardoz (Madrid), de ellos diez
de Air Europa fletados por Defensa y
uno del A400M; y los vuelos a Torrejón
organizados por el Servicio Europeo
de Acción Exterior. Posteriormente, el
11 y el 12 de octubre, otras 244 personas,
también ex colaboradores afganos
y sus familiares, llegaron a la base madrileña
en dos aviones procedentes de
Islamabad (Pakistán), tras haber salido
de su país por vía terrestre.
Además, desde el 19 de agosto la
base de Torrejón se convirtió en un
hub o centro de recepción y atención
a los refugiados afganos que habían
colaborado con las instituciones comunitarias,
desde donde algunos pidieron
asilo político en España y el resto fue
distribuido a otros países.
«Todos hubiéramos deseado —señaló
Robles— otro final para la retirada
de Resolute Support. La ambición de esa
misión era mayor. Desgraciadamente,
el resultado de las negociaciones de paz