polimotores, debió superar un curso de
supervivencia en tierra y rescate en agua.
Ya en la Alemania, la formación continúa
con un curso de capacitación específico
del avión, de unos seis meses
de duración, que se actualiza cada año
con una prueba teórica, otra en simulador
y una más en vuelo. Asimismo,
también anualmente, se debe realizar
un curso refresco de tiro, identificación
de explosivos, guerra NBQR (nuclear,
biológica, química y radioactiva), contraincendios,
equipos de supervivencia
y gestión de recursos en cabina.
Una formación completa e intensa
que también ha debido superar el comandante
Juan Diego Narbona, jefe de
Operaciones del Escuadrón y Tactical Director.
La recompensa, según el oficial, es
tener la oportunidad de participar en los
ejercicios más importantes de la OTAN,
así como de realizar misiones reales de
forma rutinaria y tomar parte en operaciones
como Inherent Resolve o Sea Guardian,
lo que aporta una experiencia «muy
difícil de conseguir en otros destinos».
ESCUADRÓN CIS
El otro Escuadrón con mando español
es el de Sistemas de Comunicaciones e
Información (CIS), liderado por el teniente
coronel Lino Iglesias. La peculiaridad
de esta unidad es que constituye
un servicio de apoyo transversal a todas
las entidades ubicadas en la base de Geilenkirchen,
es decir, no solo a NAEW
sino también a las Unidades Nacionales
de Apoyo (NSU), entidades externas
como la NSPA (Agencia de Adquisición
y Apoyo de la OTAN) o la NAPMA
(Agencia del Programa NAEW&C),
e incluso otras unidades que Alemania,
como nación anfitriona, ubica en la base
para la prestación de servicios comunes.
«No es una unidad OTAN al uso, tanto
por los medios CIS que emplea como
por las múltiples y variadas relaciones
que tiene con actores externos», explica
el teniente coronel. «El entorno en el que
se mueve es muy exigente y dinámico
para poder proveer soluciones que se
adecúen a las necesidades operativas, y
requiere un nivel técnico muy elevado,
por lo que el personal necesita un plan
permanente de actualización de conocimientos
», añade.
Además, este último año, el Escuadrón
ha tenido que hacer frente a un nue-
Modernización de la flota E-3A
EL E-3A AWACS es un desarrollo
militarizado del Boeing 707-320B.
Esta plataforma de mando, vigilancia
y control puede cubrir un área de
312.000 km2, lo que significa que dos de
estos aviones con órbitas superpuestas
cubrirían toda la península Ibérica. Puede
detectar blancos que vuelen a baja cota a
400 km de distancia y a 520 km si lo hacen
a media cota.
Diseñado originalmente como una
plataforma radar elevada, el avión ha
evolucionado constantemente durante los
últimos 30 años para hacer frente a los
cambios geopolíticos, las nuevas misiones
de la OTAN y los nuevos requerimientos
operativos, convirtiéndose en un elemento
esencial de la gestión de la batalla aérea.
Desde el Programa
Inicial de Adquisición
(1978-1988), se
han llevado a cabo
diversos programas
de mejora y modernización
con el compromiso
y la financiación
colectiva de las 17
naciones que participan
en el programa
El avión ha
evolucionado
constantemente
durante los
últimos 30 años
NAEW&C Force.
El último de estos programas de actualización
es el denominado FLEP, acrónimo
inglés de Programa de Extensión de Vida
Final, que contempla la modernización de
la plataforma para alargar su servicio hasta
el año 2035. El contrato de adjudicación
fue firmado por la Agencia NAPMA y la
compañía Boeing en noviembre de 2019
con el compromiso de que el programa
esté completado a finales de 2026.
«FLEP es un programa integral que
no solamente aborda modernizaciones y
mejoras en la plataforma aérea, sino que
incluye, además, la adaptación de los
simuladores de vuelo y de misión, el desarrollo
de nuevos sistemas de apoyo en
tierra y la creación de nuevos sistemas de
desarrollo, que comprenden un Laboratorio
de Integración del Sistema y un Entorno
de Desarrollo Software», explica el coronel
Azuaga, jefe de la División de Operaciones,
Planes y CIS del Cuartel General de
la Fuerza NAEW&C.
Con respecto a la plataforma aérea, la
mejora de capacidades y el cumplimiento
de los requisitos mínimos militares establecidos
implica abordar modernizaciones en
sus sistemas de comunicaciones de voz y
enlace de datos, mejoras en las redes de
banda ancha más allá de la línea de visión
y actualizaciones en la infraestructura de
hardware y software de los ordenadores
de misión, al mismo tiempo que se afrontan
los problemas actuales y emergentes
de obsolescencia del hardware y el software
y de disponibilidad de repuestos.
En el área de Enlaces de Datos (Data
Links), el programa
contempla la actualización
o la sustitución
de los terminales
JTIDS (Sistema Conjunto
de Distribución
de Información Táctica)
con nuevos terminales
Link-16 con
funcionalidades más
avanzadas.
En el apartado
de comunicaciones, se prevé integrar
nuevos dispositivos criptográficos para
mantener la capacidad para intercambiar
voz y datos con unidades de mando
y control a nivel operativo y táctico,
como son los Centros de Operaciones
Aéreas Combinadas, así como con plataformas
aéreas, terrestres y navales.
Además, se proveerá al avión de equipos
de comunicaciones más robustos y
resistentes a la perturbación para asegurar
las comunicaciones en ambientes
electromagnéticos complejos.
En el campo de la detección pasiva,
la modernización se va a producir en el
hardware del sistema ESM (Medidas de
Apoyo Electrónico), que va a ser completamente
renovado para hacer frente
a la obsolescencia.
42 Revista Española de Defensa Noviembre 2021