>> Nuestros Legionarios
Teniente Rafael Díaz de San Pedro Sánchez-Barbudo
M I P A S O P O R L A L E G I Ó N
Allá por agosto de 2017, el que suscribe,
un recién salido de la Academia
teniente Díaz de San Pedro hacía su
presentación en su primer destino: el
Grupo de Artillería de Campaña II de
La Legión. Tras mi presentación, me
incorporé directamente a la Escuela
Militar de Montaña y Operaciones
Especiales de Jaca para hacer las
pruebas de selección del LXII Curso de
Operaciones Especiales.
Superé las pruebas y conseguí una
plaza, pero durante el curso sufrí una
fractura en el pie que forzó mi baja del
mismo. Cuando la rehabilitación me
permitió caminar sin muletas y hacer
trabajo de oficina, me reincorporé al
GACALEG en enero de 2018, por lo
que podemos considerar que ese fue mi
primer día en La Legión. Jamás olvidaré
aquel día.
Apenas eran las cinco de la mañana
cuando todo el Grupo se desplazó a
las proximidades de Vélez Blanco para
realizar la primera marcha de doble
jornada del año: una marcha de 60
kilómetros que se hacía en dos días.
Debido a mi reciente lesión, yo iba en
el vehículo ligero de retaguardia, que
recogía a los que no podían continuar
la marcha. A pocos metros, vimos un
grupo legionarios rezagados cojeando,
visiblemente fatigados, caminando como
podían. El sargento 1º que iba conmigo
en el vehículo les presionaba para
que subieran, diciéndoles que todavía
quedaban más de 20 kilómetros por
delante y, a la vista de su estado físico
y la aparente gravedad de sus heridas,
no podrían terminar. Tercos como mulas,
los legionarios respondían que preferían
caer reventados antes de dejarse
vencer, haciendo honor a nuestro Credo.
Y así fue que, a lo largo de 20 agónicos
kilómetros, lucharon hasta conseguir
llegar, al punto final de la marcha. Allí se
quitaron las botas delante de mí y viendo
las heridas que tenían en los pies, todavía
me pregunto cómo fueron capaces de
terminar. Tras esa experiencia, ya en mi
primer día en la Legión, entendí que me
encontraba ante una tropa excepcional.
Hasta julio de 2020 que cambié de
destino, formé parte de la Batería de
Plana Mayor y de la 2ª Batería. A lo largo
de esos tres años, encontré en La Legión
una forma de vivir la milicia sobre la cual
a menudo, en conversaciones entre
quienes la han vivido allí destinados,
surge siempre la misma cuestión,
casi filosófica: qué es o qué significa
realmente el concepto de Legión.
Yo diría que Legión es un concepto
subjetivo, que depende de la vivencia
que haya tenido cada uno, y a raíz de
mis vivencias, opino que Legión es
la compañía o batería: esos nuevos
legionarios viéndolas venir, siempre
pegados a sus compañeros más
antiguos que, a través del ejemplo, les
enseñan cómo se vive el Credo. Desde
los cabos, como pilares fundamentales
de la disciplina legionaria, hasta los
cabos 1º o el cabo mayor que, por su
veteranía y experiencia, son el máximo
exponente militar y profesional a que
debe aspirar la dama o el caballero
legionario. Los suboficiales que a la
par que exigen, velan por el bienestar,
inquietudes y responden ante los oficiales
por ellos cuando es preciso, siempre con
lealtad y caballerosidad; en especial el
suboficial auxiliar de la batería, veterano,
experimentado y antiguo, referente de
todos los suboficiales, y con una fidelidad
ciega al capitán, al que asesoran con
honesta sinceridad en sus decisiones.
Los Tenientes, que han de mandar
con ejemplaridad si quieren que sus
legionarios les sigan, y profesar absoluta
lealtad tanto a sus subordinados como
a su capitán, y para el capitán, con
decir que la batería es reflejo del que la
manda, sobran las palabras.
Todos formamos un complejo engranaje
que mueve a la batería, y la hace
funcionar como a un reloj, movidos
todos por el mismo motor: el Credo
Legionario y la mística que, hace ya
más de 100 años, ideó para esta unidad
Millán-Astray, y que hoy día sigue
vigente en las unidades legionarias.
Podré estar equivocado o no, y habrá
quien no comparta lo que he expuesto,
pero es esta enseñanza, además de
grandes compañeros y experiencias
vividas, es lo que me llevo de mi paso
por La Legión, y no solo es algo que
recuerdo con cariño y nostalgia, sino
que me ha hecho ser mejor oficial y
mejor persona.
24 556 · III-2021 La Legión