transporte logístico en los portaviones estadounidenses 625
litar la carga y descarga de material
y personal, que también puede abrir
en vuelo, lo que le permite el lanzamiento
de cargas y de paracaidistas,
por lo que puede emplearse para la
inserción de equipos de operaciones
especiales o para misiones SAR.
Su primer vuelo se produjo en
1964 y la producción comenzó el
siguiente año. Inicialmente se adquirieron
19 aparatos, para sustituir a los
Grumman C-1 Trader, entonces encargados
de la misión COD. En 1984
se ordenó un segundo lote de 39
aviones, denominados Reprocured
C-2A, con nuevos motores Allison
T56-A-425, con sistemas de aviónica
y comunicaciones actualizados, y
capaces de transportar mayor peso,
a más velocidad y a mayor distancia,
que reemplazaron a los aviones originales,
de los que el último se dio
de baja en 1987. En 2010 se mejoraron
sus prestaciones, con nuevos
equipos de aviónica y hélices de
ocho palas.
El Greyhound puede transportar
26 pasajeros o 10 000 libras de
peso entre material y personal. Su
alcance es de 1000 mn, con una velocidad
de crucero de 260 nudos,
una máxima de 343 nudos y un techo
de 30 000 pies. Actualmente
está en servicio en los escuadrones
VRC-30 y VRC-40, de Apoyo Logístico
de la Flota, con base respectivamente
en North Island (California)
y en Norfolk (Virginia), así como en
el VAW-120, también con base en
Norfolk, dedicado a la instrucción
de las tripulaciones de Hawkeye y
de Greyhound.
El C-2A compitió con el CMV-22B
en el programa de renovación del
COD. Northrop Grumman había
propuesto modernizarlo con las
alas, cabina digital y motores del
E-2D, para mejorar aún más sus
capacidades operativas, reducir el
consumo de combustible y facilitar
el apoyo al ciclo de vida. Pero
se eligió el CMV-22B, que en 2020
revista de aeronáutica y astronáutica / julio-agosto 2022
comenzó a reemplazar al C-2A, del
que quedaban 27 aparatos en servicio,
que irán siendo dados de baja
hasta 2024.
EL OSPREY: INNOVACIÓN,
CONTROVERSIA Y NUEVAS
CAPACIDADES
El V-22 Osprey es una innovadora
aeronave de rotor basculante,
que toma y despega como un helicóptero
y que vuela como un avión
turbohélice. La particular forma de
plegado de sus rotores, motores y
alas reduce el espacio de aparcamiento
y facilita su empleo a bordo
de buques, lo que unido a su capacidad
de reabastecimiento en vuelo le
permite alcanzar lugares que de otra
forma serían inaccesibles.
Su largo desarrollo, de un cuarto de
siglo, fue complejo y controvertido,
ya que se perdieron varios aparatos
y costó la vida de treinta infantes de
Marina. Se inició tras el desastroso
resultado de la operación de rescate
C-2A Greyhound, con las alas plegadas, siendo remolcado en la cubierta de vuelo del portaviones Theodore Roosevelt, el 7 de marzo de 2006.
(Imagen: Luis Díaz-Bedia Astor)