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Revista del IEEE 6

104 Revista del Instituto Español de Estudios Estratégicos (IEEE) Núm. 6 / 2015 Responsabilidad Social.11 El Sistema de Gestión Medioambiental del Ejército actúa en diversos frentes como la concienciación, la prevención, la conservación, la recuperación y la cooperación. Las actividades del Sistema de Gestión Medioambiental del Ejército incluyen como ámbitos de actuación la educación medioambiental, la legislación medioambiental, autorizaciones medioambientales, planificación y control de las actividades desarrolladas, elaboración de los estudios y proyectos que sean necesarios, operaciones y actividades militares, obras y servicios de ingeniería. La conciencia del Ministerio de defensa en la necesidad de protección de los espacios naturales como titular de los mismos, ha impulsado la adopción de medidas de conservación de su patrimonio por su compromiso con la sociedad, desarrollando un programa de acciones e inversiones dirigidas la mejora del medio ambiente. Esta posición socialmente responsable también deriva de su colaboración internacional con los foros OTAN e internacionales, como los Grupos de Trabajo Environment Protection y Environment Training que han derivado en el STANAG (Acuerdo de Estandarización OTAN) 7141EP, el 2510 y el documento del Comité Militar 469 sobre protección medioambiental. El Documento STANAG 7141 EP, Doctrina OTAN sobre protección ambiental en ejercicios y maniobras bajo liderazgo OTAN, establecen directrices ambientales que “todo jefe de contingente debe tener en cuenta al confeccionar la orden de operaciones y que deben incorporarse a ella, así como las medidas de protección ambiental a adoptar para minimizar el deterioro que se pueda producir en cualquier actividad bajo paraguas OTAN”. Numerosas bases de los Ejércitos han conseguido certificados de acreditación de la calidad ambiental de estas instalaciones y el cumplimiento de la norma ISO 14000. Por otra parte, la RS ambiental de las Fuerzas Armadas ha obligado a un organigrama y estructura con competencias y responsabilidades como la Comisión Asesora de Medio Ambiente. Por último, entre las líneas de la política ambiental debe incluirse la calidad ambiental, la mejora continua, auditorías y certificaciones que contribuyen a amortiguar la responsabilidad por daños ambientales desde el marco de la responsabilidad Social. La autoimposición de obligaciones de sostenibilidad ambiental no exigidas legalmente se reconducen a la Responsabilidad Social y corresponde a las FAS visibilizarlas ante la sociedad. 11  Respecto de los Sistemas de Gestión Ambiental (SGA) como indicador del respeto ambiental, las Fuerzas Armadas prevén en un plazo medio su implantación en el 80% de las instalaciones, si bien se ha logrado la Certificación por AENOR del Sistema de Gestión Ambiental (2010) reflejando el compromiso del Ejército de Tierra con la protección del medioambiente. http://revista.ieee.es/index.php/ieee


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