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wicht), un húngaro e, incluso, un español (Manuel Suárez). El vapor partió del puerto de Nueva york a principios de mayo de 1869, y en una escala secreta recogió el importante cargamento de armas y municiones: 4 obuses de 12 cm, 4 cañones de bronce de 12 cm y 2 carros de artillería, 50 granadas de percusión con fulminantes y 50 proyectiles esféricos para cañón, 200 cápsulas para cañones, 4.000 fusiles Springfield y 51 Remington con sus respectivas bayonetas, 50 carabinas Remington, 200 revólveres, botes de metralla, 800.000 cartuchos para rifles calibre 58 y 10.000 para carabinas Berdam, 4.000 cartuchos de Colts, 50.000 fulminantes para fusil y pistolas, así como abundantes armas blancas (sables, machetes, hachas…) y numeroso material militar y de campaña (cureñas, alzas para piezas de acero, escobillones, atacadores, cargas de metralla, plomo para fabricar balas, sillas de montar, cananas, correajes y cartucheras, cornetines, zapatos, platos metálicos, calderos…) Además, el vapor transportaba abundante correspondencia y documentos para el presidente cubano, Carlos Manuel Céspedes —incluida una «espada de honor»—, enviados por Morales Lemus, presidente de la junta Central Republicana de Cuba y Puerto Rico, con valiosa información secreta sobre posibles acciones a realizar, actitud de las autoridades y estado de la opinión pública norteamericana. El vapor consiguió desembarcar entre el 11 y el 12 de mayo de 1869 la mayor parte de su carga en el estero de Canalito y la península de El Ramón, que divide las amplias bahías de Banes y de Nipe (en la zona nororiental de la isla de Cuba, próxima a la ciudad de Holguín fig. 6, punto 3). El cargamento desembarcado se transportó el 13 de mayo hasta el paraje de La Cueva, próximo a Holguín. Pero la operación fue descubierta por las tropas españolas, que entre el 16 y el 20 de mayo, con unidades de la Marina y del Ejército, lanzaron contra los insurgentes un ataque en la zona de El Rondón y Canalito, próxima a la bahía de Nipe, donde consiguieron recuperar buena parte del material desembarcado. Expedición del vapor Anna (enero de 1870) El dirigente Francisco javier Cisneros y la junta Central Republicana de Nueva york fletaron el vapor Anna, una especie de remolcador de vapor de 72 toneladas de desplazamiento, 90 pies de eslora y 22 de manga que desarrollaba de 3 a 5,5 nudos de velocidad máxima. El Anna se puso al mando del capitán Rudolph Sommers, a quien auxiliaban como segundo juan B. Osorio y como piloto Eloy Felipe Camacho. La expedición, que tuvo un coste de 41.000 dólares, había partido de Nueva york el 29 de diciembre anterior comandada por Francisco javier Cisneros como jefe de mar y el coronel canadiense William A. Ryan como jefe de tierra. Entre los veintún expedicionarios restantes son de reseñar los coroneles Melchor Agüero y james Clancy, los comandantes Charles Mayer y juan Ariosa, y los capitanes Tom Lillie Mercer, Simón Gratz, Oscar Céspedes (hijo del presidente Carlos Manuel de Céspedes), juan Rius Rivera y Emilio Mola. Tras una escala en el puerto norteame- AÑO 2015, SUPLEMENTO N.º 22 A LA REVISTA DE HISTORIA NAVAL. Núm. 131 25


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