20 MEMORIAL ARTILLERíA, nº 172/1 - Junio de 2016 de Instrucción y Empleo Arriba: Comparación de alcances nominales del teledesignador VECTOR Abajo: Posibilidades del sistema VECTOR simas (resolución normal en unos prismáticos para la distancia habi-tual de designación y corrección de objetivos, que suelen ser tres km) suponen 15 m de desvío, lo cual es asumible no obstante por cual-quier radio de acción de los proyec-tiles de calibres actuales. La diferencia entre la distancia geométrica proporcionada por un telémetro y la horizontal es también calculable. Esto permite levantar el objetivo en función del observador a partir del ángulo de elevación que proporciona un clinómetro. A gran-des distancias es casi irrelevan-te, puesto que raro será que haya desniveles tan grandes que puedan afectar esta medida más de 50 m. Estaríamos hablando de desniveles de 600 m a 3 km. No obstante, se-gún evolucionan tecnología y proce-dimientos la exigencia en precisión tiende a ser más alta. Tampoco de-bemos olvidar que la propagación de errores afecta considerablemen-te al resultado final, además de existir otras fuentes de error como son: el posicionamiento de las pie-zas, la realización de las punterías por estas, variación de condiciones reales respecto a las tabulares, etc. Los medios de hoy en día facilitan el trabajo, y por ello tenemos disposi-tivos que nos dan distancia y orien-tación de un punto con solo centrar el retículo en él, además de facilitar otros cálculos con su brújula elec-trónica. Las posibilidades de error del observador dependen de su posi-cionamiento y de su destreza con el teledesignador previamente calibra-do. Para la noche dispone de un in-tensificador de imagen. A modo de ejemplo, estas son las especificacio-nes técnicas del fabricante para un blanco estandarizado OTAN. Pero incluso con todas estas ven-tajas y con las características de resolución que indica el fabricante (siendo la precisión en distancia de ±5 m, la angular ±10 milésimas) y existiendo la disponibilidad de un trípode, todavía estamos confiando en un elemento humano que ope-ra este dispositivo. Este debe hacer coincidir una cruz filar estando al nivel del suelo con el objetivo desea-do. Si consideramos la existencia de terrenos muy llanos, en una desen-filada con otro accidente geográfico de fondo o en una zona con vegeta-ción o malas condiciones atmosfé-ricas, la posibilidad de errar sobre el punto que realmente queremos indicar existe. Si bien parte de las medidas que fueran aberrantes se pueden descartar fácilmente, en las que estuvieran cerca del rango que cree ser estimado está el problema. Es por lo que un UAV, aparte de la perspectiva ortogonal que provee y sus mayores alcances, sobrepasa al ser humano en este aspecto.
MEMORIAL ARTILLERIA JUN 2016
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