Page 45

REVISTA GENERAL DE MARINA DICIEMBRE 2016

TEMAS GENERALES Era evidente la connivencia de los veedores y demás agentes reales con los problemas de corrupción. Por estos y otros motivos en 1557 el Rey comenzó a hacerse cargo del pago y aprovisionamiento directo de las galeras. La vida a bordo de la galera se organizaba por clases; teníamos gente de cabo, de remo y por último soldados de los tercios (Eliav, 2013). La gente de cabo solía ser de lo más granado, como hemos visto anteriormente con los genoveses, y en cuanto a la de remo «ay mucho número y pocos de provecho, todos enfermos, tullidos e inútiles». Lo usual es que las gentes de galeras fueran voluntarios y pagados, teníamos la gente de guerra, de cabos y de remos; de estos últimos los había forzados y esclavos, todos ellos perfectamente descritos en los libros, tal como regulaba la Real Orden de 1557 ordenando la puesta en marcha de los libros de asiento del personal de las galeras del rey (Sánchez Baena et al., 2012). Estos libros eran indispensables para llevar la cuenta de la condena del forzado, pues al darle libertad había que entregarle un certificado de haber cumplido su pena, la cual podía haber sido aumentada por contravenir alguna de las disposiciones disciplinarias ordenadas a bordo de las galeras. Cuando llegaba una collera o cadena de forzados a las galeras, se abría un asiento general de todos ellos, indicando de dónde provenían, descripción física, lugar y fecha en que eran recibidos y la galera donde se efectuaba la entrega (Sánchez Baena et al., 2012). Libro de Galeras con asiento de una cadena procedente de Málaga. (Catedra Naval). 816 Diciembre


REVISTA GENERAL DE MARINA DICIEMBRE 2016
To see the actual publication please follow the link above