19 Chema Suárez Serrano El periodismo en los conflictos armados... INTRODUCCIÓN: LA REALIDAD CAMBIANTE DE LAS NUEVAS GUERRAS En 2014 dos tercios de los periodistas asesinados en el mundo perdieron la vida en zonas de conflicto. En 2015 la proporción se invirtió por completo: dos tercios de los reporteros asesinados perdieron la vida en países que se dice están «en paz»1. De este dato podemos extraer dos conclusio-nes, la primera es el intolerable número de personas que continúan muriendo por el mero hecho de informar, y la segunda es que las amenazas contra la li-bertad de expresión no discriminan entre tiempo de paz o guerra. Atendiendo a esta cifra también podría pensarse que la guerra es ya menos cruenta para los periodistas, pero probablemente obedece a que muchos de los asesinatos que se producen en lugares que oficialmente están en paz, en realidad viven en un estado similar a la guerra aunque el vigente marco jurídico internacional no lo contemple así. El siglo xxi ha ampliado tanto la variedad de los formatos en los que se presentan los conflictos armados que muchas veces no es fácil dis-tinguirlos porque han superado ampliamente el planteamiento de Clausewitz. Por un lado, ya no son dos rivales enfrentados en el campo de batalla, utili-zando armas convencionales para doblegar al enemigo, y por otro, tampoco es ya el modo de arreglar disputas internacionales entre Estados, característica que terminó con el siglo xx2. Atrás ha quedado el tiempo en que la guerra sig-nificaba un enfrentamiento con soldados y máquinas frente a frente, cuando era un acontecimiento de gran amplitud, que influía de manera decisiva en la solución de las disputas internacionales3. Estos formatos no obstante aún perduran en conflictos locales de menor intensidad, pero no en el escenario internacional. La guerra está ahora en los países que no están oficialmente en guerra, y sus consecuencias elevan gravemente la siniestralidad entre los civiles y particularmente entre los periodistas por defender la libertad de expresión. La complejidad de los conflictos armados actuales desborda hoy el ámbito jurídico que marcan los Convenios de Ginebra, y despierta dudas sobre la vigencia de la clasificación entre internacional o no internacional. Semejante apreciación apenas parece ya relevante, siguiendo la doctrina de la Corte Penal Internacional, en el caso del fiscal contra Thomas Lubanga: «It is to be observed at the outset that some academics, practitioners and a line of jurisprudence from the ad hoc tribunals have questioned the usefulness of the distinction between international and non-international armed conflicts, 1 Reporteros Sin Fronteras. Informe anual 2015. <http://www.informeanualrsf.es/>. 2 SMITH, R. The utility of force. The art of war in the modern world. Penguin Books. London 2005, p. 6. 3 Entrevista al general SMITH R. publicada por la Revista Internacional de la Cruz Roja n.º 864, diciembre 2006. <http://www.icrc.org/spa/assets/files/other/irrc_864_smith.pdf>. http://revista.ieee.es/index.php/ieee
REVISTA IEEE 8
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