Editorial innovación e Ingeniería La innovación es la creación o modificación de un producto o proceso al introducir novedades en su estado actual. Es uno de los indicadores más significativos del progreso de una sociedad y una de las medidas de la competitividad entre organizaciones similares o con los mismos intereses. Una civilización, una nación o una empresa pueden “cambiar de aspecto” con respecto a cómo se encontraban en un estatus previo al introducir cambios innovadores en su forma de hacer las cosas o en las herramientas que usa para hacerlas. Específicamente, en el dominio militar, es sencillo enlazar el poderío de un país con su capacidad de innovación. La ingeniería es el conjunto de conocimientos científicos y la aplicación de metodologías bien estructuradas para el desarrollo de la tecnología, para la utilización eficiente de los recursos y fuerzas de la naturaleza en beneficio de la sociedad o para la resolución de nuevos problemas. Es una actividad que transforma el conocimiento científico en algo práctico y productivo. La ingeniería se soporta en las ciencias formales como la lógica o las matemáticas, así como en las ciencias naturales, la física, la química o la biología, utilizándose como la aplicación de conocimientos existentes, para la resolución de nuevos problemas. La ingeniería constituiría, por tanto, una de las etapas del proceso de innovación tecnológica mediante la transformación de los resultados científicos en productos o procesos nuevos. Según el Manual de Oslo OCDE (1995), las actividades del proceso de innovación son todos aquellos pasos científicos, tecnológicos, organizativos, financieros o comerciales, que realmente se enfocan a la obtención de productos, nuevos procesos o, al menos, sustancialmente mejorados. La actividad de I+D, la adquisición de tecnología, la comercialización de productos o el lanzamiento de la fabricación estarían entre ellas. La diferencia entre el resultado de la innovación y la obra de ingeniería estriba en que hay obras de ingeniería que no aportan mejoras sobre las ya existentes y, por lo tanto, no serían innovadoras. Si la construcción de un nuevo puente no aporta otras características con respecto a otro ya existente que no sean la diferente ubicación, dimensiones, etc., se estaría hablando exclusivamente de ingeniería. Si por el contrario, se utilizan aspectos novedosos referidos a la concepción, materiales o métodos constructivos, sería innovación. La innovación tiene además un carácter sociocultural debido al impacto que produce la utilización de un nuevo artefacto o la diferente forma de acometer los problemas. Según ese impacto, se puede clasificar en disruptiva: aquella que abre nuevos mercados, industrias o campos de actividad en la esfera cultural; incremental: produce cambios en las tecnologías existentes mejorándolas pero sin cambiar sus características fundamentales; cambios en los sistemas tecnológicos, combinación de las dos anteriores, que provocan efectos en diferentes áreas de producción o permiten el surgimiento de otras; y cambios en los paradigmas tecnológicos, los cuales provocan revoluciones industriales debido al amplio espectro de aplicación de los sistemas tecnológicos, afectando a las condiciones de producción de todos los sectores de la economía. La innovación no está restringida a la creación de nuevos productos, ni a desarrollos tecnológicos, ni a ideas revolucionarias. Se reconoce en la utilización dual de la misma tecnología en disciplinas distintas, o aparece como producto de la colaboración de diferentes técnicas, buscando la sinergia de ideas y consiguiendo mejorar la sociedad. La ingeniería es una parte fundamental para lograr esa innovación puesto que proporciona las herramientas y técnicas de base que facilitan ese proceso. Boletín de Observación Tecnológica en Defensa n.º 51. Tercer trimestre 2016 3
BOLETIN DE OBSERVACION TECNOLOGICA 51
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