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128 5,6% como respuesta a esa reducción de la producción acordada10. Sin embargo, esta tendencia alcista no ha mantenido su continuidad : el mercado confía a duras penas en el cumplimiento de los acuerdos de ciertos países ( un ejemplo claro es Argelia) a la vista de ciertos elementos como: el complicado escenario internacional, la escasa credibilidad acumulada de los países miembros por los reiterados incumplimientos pasados y la certeza de que el resto de actores no OPEP aprovechará la ocasión para aumentar sus propias producciones (lo que contribuirá a alejar aún más en el tiempo la posibilidad de un reequilibrio global del sector en producción y precios). No parece por tanto que el escenario de precios vaya a ser modificado en gran medida en el corto plazo. El nuevo ministro de Energía Saudí Khalid al-Falih (que reemplazó de manera sorpresiva en mayo al anterior ministro Ali Al-Naimi, empeñado en buscar un acuerdo con los países no OPEP para contener la producción) ha confirmado que la estrategia saudí no pasa por recortes bruscos de la producción sino por intervenciones suaves en el mercado. De nuevo razones de estrategia nacional no exclusivamente económica parecen aconsejar una decisión así. Por otro lado, el recorte en la producción que ofrece Arabia (500.000 bar/d) no es tan altruista o generoso como pudiera parecer: la producción saudí cae en invierno como consecuencia de sus menores necesidades energéticas fruto de temperaturas más suaves en la península arábiga. Otros miembros de la OPEP siguen reclamando un tratamiento excepcional en virtud de sus particulares situaciones internas (Libia, Nigeria o Venezuela) para que se les permita mantener o incrementar su producción. Irán reclama volver a sus niveles de producción previos a las sanciones internacionales11. Todo ello contribuye a dificultar que se alcancen acuerdos, a que estos sean respetados por todos los miembros y refuerza la estrategia saudí de mantener este bajo nivel de precios puesto que contribuye a no beneficiar vía un incremento de precios a sus grandes adversarios en el área geoestratégica como son Irak y, sobre todo, Irán. Por otra parte, se prevé en los próximos meses un incremento en la producción de fracking (después de meses de estancamiento) a tenor de los datos de actividad perforadora publicados en EE.UU., y que señalan un significativo aumento12. Esto reforzaría la estrategia saudí de mantener precios bajos en el crudo para evitar mayores pérdidas en su propio mercado de clientes. 10 http://www.opec.org/opec_web/static_files_project/media/downloads/data_graphs/MI082016.pdf 11 Irak ha anunciado unilateralmente su intención de incrementar su producción a partir de enero de 2017. 12 https://www.eia.gov/petroleum/drilling/pdf/summary.pdf bie3 ƌĂďŝĂ^ĂƵĚş͗ŶƵĞǀŽƐƚŝĞŵƉŽƐ͕ǀŝĞũŽƐƉƌŽďůĞŵĂƐ &ƌĂŶĐŝƐĐŽDĄƌƋƵĞnjĚĞůĂZƵďŝĂ ŽĐƵŵĞŶƚŽĚĞŶĄůŝƐŝƐ ϲϰͬϮϬϭϲ ϴ


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