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REVISTA GENERAL DE MARINA MAYO 2017

TEMAS GENERALES siones, pondría pie a tierra en la bahía de Sagami (13), al suroeste de la de Tokio, para capturar la base naval de Yokosuka y el importante centro fabril de Yokohama, así como los aeródromos existentes en la zona, siendo reforzado el día Y+5 con otras dos divisiones de infantería y, a partir del día Y+10, con otro cuerpo con dos divisiones acorazadas, que avanzaría por el corredor del río Sagami hacia el norte, ya que la región de la capital, aparte de ser el núcleo industrial del Japón, era la única en todo el archipiélago con llanuras lo suficientemente amplias para desplegar grandes formaciones acorazadas y motorizadas (ver figuras); de ser necesario, se reforzaría con una división de infantería más de la reserva de teatro. Posteriormente, a partir del día Y+35, con el desembarco de nuevas divisiones, se reforzaría el potencial de las unidades en línea y se constituiría el 10.º Ejército para tomar los centros nodales al norte de la capital y aislarla y, entre los tres, ocupar Tokio. Se estimaba necesario desembarcar un total de 29 divisiones para esa tarea y, si aún así no fueran suficientes, las fuerzas expedicionarias serían reforzadas con cuatro divisiones adicionales por mes de las repatriadas procedentes de Europa o de las organizadas en el territorio continental de los Estados Unidos hasta finalizar la misión encomendada. Los tres ejércitos no se constituirían en un grupo de ejércitos, sino que serían mandados directamente por el general MacArthur —aparte de comandar toda la operación—, para lo cual había decidido organizar un puesto de mando avanzado en tierra desde el que pudiera asumir esas funciones (14). En la zona de Tokio se esperaba mucha menos resistencia que en Olympic, pues los planificadores americanos pensaban —tal vez con excesivo optimismo, como luego se comprobó al finalizar la guerra— que la flor y nata del Ejército japonés, su Armada y Fuerza Aérea habrían sido aniquilados en la defensa de Kyushu, y que la acción aérea impediría a los nipones reponer el armamento destruido. En caso de necesidad se esperaba contar con tropas de países aliados (ingleses, franceses, polacos, australianos, holandeses, etc.), ya disponibles desde la rendición de Alemania. El día Y se había fijado tentativamente para el 1 de marzo de 1946. Naturalmente, el transporte, protección y apoyo de esa ingente fuerza correría también a cargo de la Flota del Pacífico de Nimitz: la V Flota de Spruance, más reforzada, para las tareas anfibias y la III de Halsey para la cobertura lejana, correspondiendo a las V, VII y XIII Fuerzas Aéreas del general Spaatz el apoyo aerotáctico desde los aeródromos conquistados en (13) Tres cuerpos y ocho divisiones (X Cuerpo, con las 24.ª, 31.ª y 37.ª divisiones de Infantería; XIV Cuerpo, con las 6.ª, 32.ª y 38.ª divisiones de Infantería, y XIII Cuerpo Acorazado, con las 13.ª y 20.ª divisiones acorazadas), así como la 97.ª División de Infantería de reserva de teatro. Las unidades previstas para desembarcar los días Y+5 e Y+10 permanecían a flote listas para bajar a tierra en el mínimo tiempo si fuera necesario. (14) Era también una costumbre del general establecer sus puestos de mando cerca de las tropas, próximos al enemigo y en lugares de riesgo para motivar a sus hombres con el ejemplo. 2017 657


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