Page 503

BOLETIN IEEE 5

503 amplios sectores de una población sumida en la pobreza y desencantada con sus dirigentes. Tras la Primera Guerra Mundial la economía comenzó un declive global que llevó al crack del año 29 y la gran depresión. Alemania fue el país más castigado pues al negativo contexto internacional había que añadir las condiciones impuestas por el Tratado de Versalles (reparaciones de guerra, perdida de territorios, reestructuración de la industria…). En 1921 comenzó una hiperinflación nunca vista (en 1923 llegaron a imprimirse billetes de 100 billones de marcos) que empobreció a una clase media que apenas podía subsistir. En este ambiente el NSDAP comenzó a ganarse muchas simpatías denunciando las leoninas imposiciones del Tratado de Versalles y prometiendo el resurgimiento de una Alemania fuerte y próspera. La situación social y económica en la mayoría de los países musulmanes es bastante delicada. Tan solo se salvan —con reservas— algunos que gracias a sus ingresos petrolíferos pueden permitirse unas finanzas saneadas; decimos con reservas por qué estos países tampoco están exentos de tensiones sociales y desigualdades (muy en particular en lo referente a cuestiones de género). El caso es que si atendemos al Índice de Desarrollo Humano (IDH)22 podremos comprobar que los últimos puestos en el ranking son ocupados mayoritariamente por naciones donde la población es mayoritariamente musulmana. En el informe del IDH 2015 se incluyó un estudio por zonas23 que confirma esta aseveración (ver cuadro 1). 22 El Índice de Desarrollo Humano es un indicador creado por el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo con el fin de determinar el desarrollo de los países del mundo. 23 Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo. «Informe sobre Desarrollo Humano 2015». ISBN: 978- 92-1-326063-0. P. 213. bie3 ͨĞƌ/ƐůĂŵŝƐĐŚĞ>ĞďĞŶƐƌĂƵŵͩ ŶƚŽŶŝŽƐƚĞďĂŶ>ſƉĞnj ŽĐƵŵĞŶƚŽĚĞKƉŝŶŝſŶ ϬϳͬϮϬϭϳ ϭϭ


BOLETIN IEEE 5
To see the actual publication please follow the link above