Page 867

BOLETIN IEEE 5

867 En cualquier caso, por tierra, por mar y por aire nuestras Fuerzas Armadas han respondido brillantemente a cuantos compromisos han sido requeridas. Especialmente, y sin menosprecio de ninguno, en entornos terrestres de gran dureza —Afganistán es un caso paradigmático, sin olvidar esa compleja Bosnia—, alejados decenas o cientos de kilómetros de la mar, debiendo mantener unas cadenas logísticas largas y complejas, la concurrencia de capacidades del Ejército de Tierra, de la Armada y del Ejército del Aire ha sido capaz de proporcionar la respuesta adecuada a cada momento, especialmente a los hombres y mujeres que, pie a tierra, hacen de su presencia y determinación su mejor herramienta de trabajo y muestra patente de voluntad de vencer y de cumplir a toda costa la misión encomendada. Solo gracias a un alto grado de preparación, de motivación y al mantenimiento de un conjunto equilibrado de capacidades se ha podido atender a estas demandas, a estos requerimientos esenciales para cumplimentar tanto los intereses nacionales compartidos como los no compartidos. Las Fuerzas Armadas españolas, han sido, por definición y condición, fuerzas expedicionarias; la España que descubrió e incorporó un mundo a las tierras conocidas, bie3 >ĂůƵĐŚĂƉŽƌĞůƉůĂŶĞƚĂLJĞůĨƵƚƵƌŽĚĞůĂƐ&^ĞƐƉĂŹŽůĂƐ WĞĚƌŽ^ĄŶĐŚĞnj,ĞƌƌĄĞnj ŽĐƵŵĞŶƚŽĚĞKƉŝŶŝſŶ ϮϴͬϮϬϭϳ ϭϮ


BOLETIN IEEE 5
To see the actual publication please follow the link above