Nacional Si a un profesor universitario, a un empresario 40 o a un joven emprendedor le propusieran abandonar la comodidad de su despacho o de su oficina, pasar la noche al raso, sin apenas dormir, y con la posibilidad de llevarse de recuerdo la señal de una bola de paintball en alguna parte del cuerpo, ¿cuántos aceptarían? Pues en Asturias ya hay cerca de un centenar que han respondido positivamente a la invitación de la Universidad de Oviedo y el Regimiento “Príncipe” nº 3 para vivir esa experiencia, incluida como parte práctica en las “Jornadas de Liderazgo Aplicado”, que en marzo celebraron su III edición. Poder aprender liderazgo de la mano de quienes lo ejercen a diario, y en su hábitat natural, consideraron que merecía la pena el esfuerzo. Esta práctica dirigida a los civiles también se incluye, de forma parecida, en la colaboración que realiza el Regimiento “América” nº 66 con la Universidad de Navarra en el “Curso de liderazgo, gestión de equipos y toma de decisiones en situaciones de riesgo” para alumnos del programa Economics, Leadership & Governance de la Facultad de Ciencias Económicas y Empresariales. En ambos casos, el curso tiene una parte teórica y otra práctica. Esta última consiste en una jornada de instrucción continuada de las programadas dentro del plan de instrucción y adiestramiento de la unidad. Para los militares también resulta de gran interés, porque la presencia de civiles introduce un elemento de novedad. «Supone un extra de motivación para el personal, y un plus de realismo », asegura el capitán Lopera, jefe de la 2ª Compañía del Batallón “Toledo”, encargada de empotrarlos en sus filas. Se asignaron roles a los civiles (periodistas, médicos o personal de cooperación...), para que no se sintiesen meros espectadores. Se les repartió por los diferentes pelotones y se convirtieron en uno más del equipo. Entre las misiones que se les plantearon, una fue escoltar a una cónsul española que iba a inaugurar un depósito de agua en una población. El escenario de esta estación fue el Centro de Seguridad Marítima Integral “Jovellanos”, de Salvamento Marítimo, cercano al acuartelamiento “Cabo Noval”. El papel de la cónsul, al igual que el de dos periodistas que iban a hacerse eco de la noticia, se le había asignado a civiles. Mientras el pelotón hacía el reconocimiento, sufrieron el ataque de un grupo de insurgentes. El teniente jefe de la sección tuvo que tomar decisiones de forma rápida y clara, en medio de toda la tensión, porque la seguridad de su personal y de la autoridad estaban en sus manos. Ejerció su papel de líder según el nuevo estilo de liderazgo que se fomenta dentro del Ejército: el mando orientado a la misión. «A los jefes se les asigna una misión y un propósito, y con esa información tienen que tomar sus propias decisiones en situaciones así, con cierta autonomía», explicaba el capitán.
TIERRA DIGITAL 33
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