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106 CARLOS LOZANO LIARTE Finalmente la OIC concedía la condición de noble al recompensado, invirtiéndose lo exigido premialmente en la Orden de Carlos III, en la que se requería la condición de noble para recibirla mientras que aquella, por la de OIC, concedía al recompensado la “nobleza personal”. OIC – Cruz (anv.) OIC – Cruz (anv.) En las diferentes insignias de sus grados se puede apreciar el juego de los colores de la enseña nacional, el amarillo, por el oro de América, y el rojo, por la sangre derramada por los patriotas en defensa de aquellos territorios. LA ORDEN DEL MÉRITO NAVAL Sin duda a efectos de nuestro trabajo resulta la recompensa española más importante, por incorporar plenamente el diseño de la enseña nacional en el cromatismo de sus cintas. Recompensa muy importante, aunque hoy haya descendido un peldaño en su importancia premial al dejar de ser una Orden y convertirse en una simple, aunque importante también, “Cruz al Mérito Naval” (CMN), bajo cuatro distintivos, el rojo, el azul, el amarillo y el blanco; de los que más tarde hablaremos. En 1866 una Real Orden28 creaba esta “Orden del Mérito Naval”, siguiendo la estela de la institución en 1864 de la “Orden del Mérito Militar”, para recompensar acciones de valor y mérito en el marco de la acción militar de la Marina de Guerra bajo cuatro categoría que premiarían a los mando de la Armada desde Guardiamarinas a Capitanes Generales, estableciéndose igualmente una Cruz de Plata para las categorías inferiores a Guardiamarinas. 28  De 3 de agosto de 1866. Revista de Historia Militar, II extraordinario de 2018, pp. 106-182. ISSN: 0482-5748


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