Page 19

Revista_IEEE_13

19 Palmerino Cuneo Terrorismo y criminalidad organizada: el sistema de… El terrorismo y las multiplicaciones de la crisis que provoca se presentan como fe-nómenos «lógicos» de la globalización económica, comercial y financiera6, en cuanto las actividades ilícitas se integran y se internacionalizan con la misma (o superior) ve-locidad que las actividades legales. En el Sahel interactúan sindicatos del crimen, cár-teles de la droga, estados fallidos y grupos terroristas, provocando que esta economía política del terror se adapte perfectamente a la economía política global. Guerreros y campo de batalla posmoderno Las proxy war7 de antaño se ven hoy obligadas a adaptarse a una mayor complejidad relacional, fase de la posmodernidad que Baumann denominaba de «interregnum»8 caracterizada por la creciente interdependencia entre las «viejas» y las «nuevas» poten-cias globales. Estas guerras por procuración de la posmodernidad, de acuerdo con el World Economic Forum9, asumen un carácter interestatal10 y se juegan en estas áreas grises, donde la interdependencia es estructuralmente asimétrica, porque aquí pueden minimizar sus efectos y gozar totalmente de los beneficios. Hoy nadie quiere colonias o dominios, la competición está en el control de los recursos primarios y de las cadenas de suministro: el control de las interconexiones determina los equilibrios globales11. 6  LABÉVIÈRE, Richard. Terrorisme, face cachée de la mondialisation. Paris: Pierre-Guillaume de Roux, 2016. 7  Se trata de una guerra donde las grandes potencias utilizan a terceros (mercenarios encubiertos, grupos guerrilleros revolucionarios, yihadistas, etc.) como sustitutos. 8  BAUMANN, Zygmund. «Times of Interregnum», Ethics and Global Politic, vol. 5, n. 1, 2012, pp. 49-56. Disponible en: https://doi.org/10.3402/egp.v5i1.17200 (fecha de acceso: 2 de mayo de 2018). 9  WORLD ECONOMIC FORUM. «International Conflict Top List of Global Risks in 2015», 15 de enero de 2015. Disponible en: https://goo.gl/bwSZoM (fecha de acceso: 4 de mayo de 2018). 10  Como las que tienen lugar en Ucrania (véase MOTYL, Alexander. «Time for a hybrid warfare against Russia», WorldAffairs, 25 de noviembre, 2014. Disponible en: https://goo.gl/rnS6LE (fecha de acceso: 2 de mayo de 2018) o en Siria (véase ABUKHAIL, Assad. «The 8 proxy wars going on in Syria right now», The Huffington Post, 24 de noviembre, 2014. Disponible en: https://goo.gl/TPJfAf (fecha de acceso: 13 de febrero de 2018). 11  Una lógica que por ejemplo se manifiesta en Ucrania como en Oriente Medio (con el eje Siria- Irán o entre Rusia, Irán e India; la tensión en Xin Yang por su ansiedad de conexión a las supply chain; la independencia del Kurdistán, o el proyecto del oleoducto afgano que tenía que conectar el Turkmenistán con India). El elenco sigue en Albania y Kosovo, que hoy se vuelve una encrucijada para el yihadismo en proximidad del TAP (Trans Adriatic Pipeline) que conectará el petróleo de Azerbaiyán a Europa fronterizo (consulta: 2 mayo 2018. Disponible en: https://goo.gl/JcQUkx), o el florecer del Daesh en el confín entre Myanmar y China (en la región del Rakhine, donde vive la minoría islámica de etnia Rohingya), donde pasará el oleoducto que, a través del puerto de Kyaukpyu, asegurará una conexión alternativa entre el Dragón y el petróleo de Oriente Medio. Esta misma lógica se repite en el Sahel con el oleoducto que parte de Nigeria hacia Marruecos excluyendo Argelia (consulta: 2 mayo 2018. Disponible en: https://goo.gl/GTjVXh) o en otro que desde Sudán del Sur intenta con fatiga llegar a Kenia: la amenaza «terrorista» se ha vuelto a despertar en Argelia, y Al Shaabab pone su Revista del Instituto Español de Estudios Estratégicos n.º 13 - Año: 2019 - Págs.: 15 a 46


Revista_IEEE_13
To see the actual publication please follow the link above