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merluzas, rapes, lubinas y un amplio etcétera que tanto conocemos. Los agnatos evidentemente son peces muy primitivos, tanto que podemos considerar a la lamprea como la pintura rupestre de los vertebrados marinos. Y por eso vamos a emplearla como modelo y origen para intentar deducir cómo pudieron evolucionar los demás. Es que eso de no tener mandíbulas para capturar y masticar el condumio es todo un hándicap que impide a las lampreas cazar y comer presas veloces y diversas, anula su defensa y les limita a un vivir parasitario y carroñero impropio de un animal evolucionado. Lo que está claro es RUMBO A LA VIDA MARINA Detalle de la boca de la lamprea. Por su incapacidad de morder, cazar y defenderse está condenada a una vida parasitaria o carroñera muy atrasada. Su larva se parece mucho a un anfioxo adulto. (Foto: Juan Carlos Epifanio). que para subsistir y evolucionar no hay nada mejor que ser depredador, porque quien no puede morder está condenado a ser víctima. En efecto, las lampreas en origen son hematófagas y, por tanto, su alimentación se basa en vaciar de jugos nutricios a sus presas, a las que capturan haciendo ventosa con su boca circular, arañando el lugar de ataque con sus series concéntricas de elementales dientes córneos que tienen en su lengua, con los que producen una herida a la que añaden un anticoagulante, tipo heparina, para que permanezca abierta, y a través de ella puedan dejar exhausto al animal parasitado hasta succionar totalmente sus entrañas. Con tal currículo, siento mucho desencantar a los forofos del MasterChef, «Piltrafillas socarradas de lamprea vintage con pimientiños almibarados de la abueliña Canduxa», pero ya saben lo que comen. Torrente Ballester, creo recordar que en su Saga/Fuga de J. B., es tajante al respecto: «En Castroforte, además de un Cuerpo Santo, hay un río con lampreas que se alimentan de los cuerpos de los pobres desdichados que encuentran la muerte en sus aguas». Dispensando por señalar. Y porque interesa a nuestro objetivo de irnos aproximando al pulmón, examinemos ahora una característica bien visible en los tres grupos de peces citados: el aspecto exterior de su sistema branquial, de suma importancia para comprender el desarrollo del pez, la evolución del vertebrado llamado a respirar aire atmosférico. Me explico: en los costados de las lampreas vemos claramente un rosario longitudinal de círculos, que son las aberturas de unas ampo- 2019 55


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