Se nos enseña desde nuestros inicios en la milicia conceptos que se van quedando bien grabados en nuestro interior. Aquello que en un primer momento nos puede llegar a costar y suponer un esfuerzo, se transforma a través de la repetición, en una acción que se desarrolla de un modo automático. El aprendizaje es el conjunto de habilidades y conocimientos que una persona adquiere para poder responder ante una situación, un problema o una difi cultad, pero este aprendizaje requiere de un tiempo necesario. Me parece interesante marcar una diferencia entre las tareas de un militar y las de cualquier otro trabajo. La oportuna realización de una acción en ambiente de combate va a marcar la diferencia entre cumplir o no nuestra misión o llevarnos a poner en riesgo la propia vida y la de nuestros soldados. Por ello, cuanto mayor sea el número de habilidades y procedimientos que tengamos bien automatizados, antes reaccionaremos ante un ataque o un hostigamiento, pudiendo suponer esto, como en el caso de Mali, salvar la vida de nuestros compañeros. Estos meses pasados estuve desplegado en Zona de Operaciones, concretamente en Mali, en el Koulikoro Training Center (KTC). Allí los cometidos de la Force Protection son muy variados. Se establecen tanto cometidos de seguridad física a las instalaciones de la Base, como seguridad a los adiestramientos del personal militar maliense o incluso escoltas de convoyes a distintos elementos de la Fuerza (personal VIP, equipos de capacitadores…). Los ataques terroristas por grupos islamistas radicales son una realidad en este país. Dichos ataques o atentados se van extendiendo cada vez más a lo largo de toda la extensión del país donde van consiguiendo una serie de objetivos. El 24 de febrero el contingente español sufrió un atentado terrorista. Se trató de un ataque complejo por parte del enemigo con dos fases bien marcadas. La primera fase consistió en hostigamientos en distintas zonas de la Base con el fi n de que el personal de guardia focalizara su atención en esas zonas donde la Base estaba siendo atacada. Después comenzó la segunda fase, a partir de la cual, dos vehículos suicidas con explosivos se aproximaron a la puerta principal de la Base. El objetivo era que el primero de los vehículos llevara a cabo la apertura de la puerta principal detonando el explosivo de su interior. Una vez producida esta apertura, el segundo vehículo accedería al interior de la Base para producir una catástrofe de gran magnitud. El ataque tuvo lugar a las 03:00 de la mañana. Teniendo en cuenta que a esa hora la mayor parte del personal se encontraba durmiendo, la explosión provocó una enorme incertidumbre. Cuanto más tiempo se tarde en reaccionar o eliminar esa incertidumbre, peores serán las consecuencias. En el caso del ataque se pudo reaccionar de una manera efi caz gracias a la puesta en marcha de los procedimientos establecidos y, anteriormente, practicados conforme a las Rules of Engagement - ROEs autorizadas y que el personal de guardia reaccionó perfectamente respondiendo al fuego. En la puerta principal había dos soldados españoles, y ambos realizaron fuego efectivo sobre los terroristas consiguiendo frenarlos. Estado de la puerta principal después del ataque. Foto del autor Agosto - 2019 Armas y Cuerpos Nº 141 73
ArmasCuerpos_141
To see the actual publication please follow the link above