DICIEMBRE 2019
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Dejaremos aparte el análisis del trámite que sigue la autoridad civil hasta que llega a la
unidad militar a la que se le ordena ejecute todas aquellas acciones ya que finalmente
consigue su propósito aunque con un amplio margen de incertidumbre en cada caso.
En nuestro caso, el solo conocimiento de la existencia de esta petición tiene una
consecuencia directa para la unidad militar que va a recibir la responsabilidad de
ejecutar la misión; la emisión de una orden de alerta y activación del Destacamento
Avanzado (DAV). Destacamento Avanzado formado por un equipo pequeño (un
oficial, un suboficial y dos soldados) cuyo trabajo, como se verá posteriormente, es
fundamental.
La petición que expresa la autoridad civil, habitualmente por carta, no está, ni lógicamente
estará, redactada conforme a los patrones específicos del lenguaje militar. La
descripción de la necesidad será genérica y por tanto no debe esperarse que venga
establecida con la suficiente claridad como para deducir todos los cometidos que habitualmente
recogen nuestras órdenes. Tampoco contemplará los elementos básicos que
debe contener toda misiónel para qué, el quién, el dónde ni el cuándo- o al menos no
estarán definidos conforme nuestros parámetros. La insuficiencia de información será
la característica más común en esta fase.
Por otra parte, si aparecerán términos como “gravedad de la situación, premura, ASAP9,
situación de emergencia, urgencia, dificultades de la población civil, quebrantos económicos,
malestar, etc.” que unidos a que en muchos casos la petición de la autoridad
civil será publicada o emitida por los medios de comunicación, generará una presión
sobre la forma de actuar del Ejército del cual se espera rapidez, eficacia y rotundidad
en sus acciones.
Esta circunstancia más la necesidad de obtener información de primera mano – que
permita “traducir” todos los aspectos de la decisióndemandará que la opción de respuesta
militar principal e inmediata sea el despliegue del Destacamento Avanzado.
Lo que nos lleva a una primera reflexión: el procedimiento de constitución de DAV debe
estar planeado y adiestrado porque, si bien entre la alerta que se inicia con el conocimiento
de la solicitud y la decisión de desplegar el DAV existe un tiempo, la experiencia
ha demostrado que en la mayoría de las ocasiones este será tan exiguo que no permitirá
que un equipo, sin adiestrar, conozca perfectamente todos los cometidos que deben
desarrollarse una vez establezca contacto con la autoridad civil.
La decisión del desplegar el DAV y su trabajo se convertirá, por lo tanto, en el pilar fundamental
sobre el que se apoyará la ejecución del apoyo solicitado.
2.2. DESPLIEGUE DEL DAV. LA COORDINACIÓN INICIAL
Son numerosos los aspectos que deben ser bien delimitados y coordinados antes de
iniciar la operación propiamente dicha.
La responsabilidad de coordinar estos aspectos recae en gran parte sobre la autoridad
civil que solicita el apoyo. Pudiera parecer que el papel del personal que constituye el
DAV – que lógicamente debe estar presente en la mencionada reunión.está al nivel de
los otros representantes. Sin embargo, su trabajo, como se expondrá a continuación,
será fundamental.
9 As soon as posible.