Sistema de ensamblado tipo implosión
Fat Man), el material radiactivo se fracciona en
partes subcríticas (lentes) de una esfera4 , se rodea
de explosivo convencional y al explosionar
se comprime el Pu y se forma la esfera que ya
tiene una masa crítica para provocar la reacción
en cadena (Por su mayor rendimiento este es el
único diseño que se emplea desde entonces).
La complejidad de manejo del Pu y del sistema
de implosión de la bomba, decidió la construcción
de una bomba de prueba (Trinity) y su
detonación. Esta se explosionó el 13 de julio de
1945 en Alamogordo, y su potencia estimada fue
de 20 kilotones (kt)5. La explosión se escuchó en El
Paso (a más de 140 km). Fue un éxito y confi rmó
que EEUU estaba preparado para utilizar la bomba
en la guerra.
Una característica importante de toda esta
operación fue el secreto. A pesar de los miles de
hombres que trabajaron en las distintas fases y lugares
del proyecto apenas unas pocas docenas
sabían lo que estaban haciendo. El personal más
cualifi cado solo conocía su parcela y tenía prohibido
hablar de su trabajo con otros, incluida su familia,
y los menos cualifi cados solo sabían lo que
tenían que hacer, pero no para que servía su trabajo6.
Los controles de entrada a las instalaciones
eran muy rigurosos y si no se cumplía, el despido
era inmediato. En Alamogordo, Oak Ridge y otras
instalaciones, se construyeron ciudades cerradas
para que vivieran las familias, pero los contactos
entre los residentes estaban muy limitados, y más
aún con el exterior, se controlaba todo lo que salía
y lo que entraba. La censura sobre los trabajos
científi cos y tecnológicos comenzó en 1939, no
pudiendo publicarse nada sobre las investigaciones
nucleares para evitar que esa información
llegara a Alemania y Japón. Aún así, a pesar de
todas las medidas la URSS consiguió infi ltrar espías
entre los científi cos, siendo Klaus Fuchs el más
destacado, pues ejerció un puesto relevante en
los Álamos. (Se estima que la información enviada
a la URSS adelantó su esfuerzo en varios años).
La prueba de que todas estas medidas funcionaron
y de que se consiguió mantener el secreto
fue que la incredulidad del mundo por la explosión
de Hiroshima fue total.
¿Cuánta gente trabajó en el proyecto?
Es difícil saber cuánta gente trabajó en el proyecto,
pero parece ser que alcanzó la cifra de
129.000 personas, entre las que se encontraban
pocos militares. La mayor difi cultad para “reclutar”
a este elevado número de personas fue la
competencia con otros proyectos vitales en tiempo
de guerra, especialmente en lo relativo al personal
más cualifi cado, por lo que en marzo de
1944 el gobierno le otorgó la prioridad más alta.
Los científi cos eran evaluados por otros científi cos
e invitados por amigos o conocidos. Como curiosidad
comentar que el Cuerpo de Mujeres del
Ejército participó en un principio, en tareas administrativas
y de gestión de material clasifi cado,
pero al poco tiempo pasó a ejercer también tareas
científi cas y técnicas.
¿Y el aspecto médico?
A pesar de que apenas se conocían los efectos
de la radiación, se nombró como jefe de medicina
del proyecto al coronel radiólogo Warren,
que tenía a su cargo los hospitales de las distintas
localizaciones, era responsable de la investigación
médica y de los programas de salud y seguridad.
Teniendo en cuenta el elevado número
de materiales tóxicos con los que trabajaban, e
investigaban, los accidentes fueron muy pocos.
En 1945 se le otorgó un premio por ello, pues se
estima que el número de accidentes fue un 62%
menor que en la empresa privada.
¿Cuál fue su coste?
Es casi imposible de saber, estábamos en tiempos
de guerra y el esfuerzo que se realizó, fue
enorme. El presupuesto total fue de 2.400 millones
de dólares. Más del 90 % se empleó en la construcción
de las plantas y la producción de los
materiales fi sibles, y un 10 % para el desarrollo y
producción de las armas. Se fabricaron 4 bombas
por lo que podemos decir que cada una costo
unos 600 millones de dólares. ¿Es mucho? Juzguen
ustedes, teniendo en cuenta que equivale
a 9 días de combate7, que es inferior al coste de
fabricación de todas las armas individuales suministradas
al Ejército, en concreto el 90% o que corresponde
al 34% del coste de los carros de com-
104 Armas y Cuerpos Nº 144 ISSN 2445-0359