editorial
TECNOLOGÍA E INNOVACIÓN EN LA NUEVA DIRECTIVA DE
DEFENSA NACIONAL
El pasado 11 de junio 2020, el presidente del Gobierno
firmó la nueva Directiva de Defensa Nacional 2020, docu-mento
que establece las líneas de actuación y objetivos
del Ministerio de Defensa para esta legislatura, además de
dar inicio al nuevo ciclo planeamiento de la defensa de Es-paña.
Si bien son muchos los elementos de interés incluidos en
la nueva directiva, desde el punto de vista tecnológico re-sulta
de especial interés la directriz de actuación 14, que
pone precisamente el foco en el fortalecimiento de la base
tecnológica e industrial de defensa a través del desarrollo
tecnológico y la innovación, como medio para mantener
a las FAS en la vanguardia tecnológica. Además, apunta
a la cooperación con otros departamentos con responsa-bilidades
en tecnología e innovación a nivel nacional para
lograrlo, en particular potenciando la participación de esta
base tecnológica en los proyectos tecnológicos clave que
se están promoviendo a nivel europeo.
Se trata de una directriz que, además de incidir directa-mente
en los objetivos de la Política de I+D+i de Defensa,
resulta plenamente coherente con el camino iniciado por
la DGAM en 2016, año en el que la Comisión Europea
publicó la comunicación sobre el Plan de Acción Europeo
de Defensa (EDAP), dirigido a lograr importantes grados
de participación nacional, retorno industrial y alinea-miento
con las necesidades de defensa de las iniciativas
promovidas a nivel europeo. Y es asimismo consistente
con los trabajos que desde 2019 se han venido llevando
a cabo en el marco del Protocolo General de Actuación
entre el Ministerio de Defensa, el Ministerio de Ciencia e
Innovación, el Centro para el Desarrollo Tecnológico In-dustrial
(CDTI) y la Agencia Estatal de Investigación (AEI),
en apoyo y promoción de la tecnología y de la innovación
en los ámbitos de defensa y seguridad. En ellos, preci-samente
se ha incidido en la búsqueda de apoyos para
el tejido tecnológico nacional en torno a las iniciativas
que se están poniendo en marcha en Europa en apoyo
al sector industrial de defensa, así como en la potencia-ción
de las sinergias entre las inversiones de CDTI en
proyectos duales y sus posibilidades de utilización futura
en defensa.
La cooperación tecnológica a nivel nacional es además
uno de los pilares sobre los que se espera sustentar la
estrategia tecnológica del Ministerio de Defensa en los
próximos años, tal como recoge el borrador de la nueva
versión de la Estrategia de Tecnología e Innovación para
la Defensa (ETID-2020), que se espera vea la luz en los
próximos meses.
El desarrollo de esta nueva versión de la ETID coincide en
el tiempo con los trabajos de desarrollo de la nueva Es-trategia
Española de Ciencia, Tecnología y de Innovación
(EECTI 2021-2027), en la cual la ETID se enmarca como
estrategia sectorial. En la medida que se logre aprovechar
las sinergias que existen entre las actuaciones duales pro-movidas
por los planes estatales que se deriven de la EEC-TI
y las necesidades futuras del sector de la defensa, será
posible aproximarse a los fines planteados en esta directriz
de actuación, todo ello en beneficio del fortalecimiento de
la defensa nacional y al desarrollo de la base tecnológica e
industrial y de la sociedad en general.
Boletín de Observación Tecnológica en Defensa n.º 65. Segundo trimestre 2020 3