64 JESÚS CANTERA MONTENEGRO
El presupuesto del cuartel estimaba que el coste de cada barracón
de tropa ascendería a 8.500 pesos, el de cuerpo guardia del oficial a 6.700
pesos y el del cuerpo de guardia de tropa a 7.000; el de cocinas y letrinas,
5.100 pesos, los cobertizos del repuesto de municiones, 500 pesos y el de
caballerizas, 400 pesos; el cierre del perímetro del cuartel, 1.802,10 pesos,
el arreglo de las calles para lograr comodidad y evitar enfangados en época
de lluvias, 1.297,90 pesos y los depósitos para el agua potable, 5.200 pesos,
con lo que el total del presupuesto del cuartel era de 96.000 pesos.
Puede servir este cuartel como ejemplo de obra sencilla y más económica,
adaptada a las necesidades de un lugar concreto y casi como un intermedio
entre lo que puede ser un campamento militar y un cuartel de obra de
fábrica, sirviendo también de contraste con la sofisticación y magnificencia
del anterior cuartel mejicano que se ha comentado.
CONCLUSIONES
Tras haber considerado una serie de cuarteles levantados en el amplio
solar hispanoamericano que pueden servir de ejemplo de su rica variedad
tipológica, así como del diverso origen que aquellos pueden tener, estamos
en disposición de plantearnos algunas ideas a modo de conclusiones.
Previamente hemos de decir que los ejemplos analizados son de zonas
muy diferentes y que los datos y comentarios que de ellos hemos hecho han
estado basados en información tomada de fuentes primarias, pues tanto en la
parte de documentación de textos, como de planos, los testimonios proceden
de importantes y significativos archivos, como el de Indias y el de Simancas,
lo que fundamenta los argumentos expositivos y evita las conjeturas. También
hemos buscado un variado elenco de cuarteles para que los hubiera de
diferentes tipologías, distintos tamaños, variados orígenes y circunstancias.
Con esas premisas, un primer punto a tener en cuenta es que los cuarteles
hispanoamericanos son una derivación directa de los que se hacían en
la Península Ibérica, pues no en balde era el mismo gobierno, las mismas
instituciones y los mismos ingenieros militares los que promovían y controlaban
los proyectos y las obras en todo el dilatado territorio de la Corona
española, apreciándose apenas una adecuación a las circunstancias particulares
de cada territorio. De todos modos, al ser en general notablemente
diferentes las condiciones de vida de las unidades establecidas, temporalmente,
o fijas, en los territorios americanos con respecto a las europeas,
en ocasiones, y en determinados momentos, sí se plantearon edificios con
características diferentes.
Revista de Historia Militar, 128 (2020), pp. 64-70. ISSN: 0482-5748