Moreno-Moreno M., et al.
ello, la Dirección del HGDZ activó la Comisión de Seguimiento
de Epidemias y elaboró un Plan de Contingencia adaptando el
funcionamiento del hospital a las exigencias de la pandemia.
ACTUACIONES DESARROLLADAS EN EL HOSPITAL
GENERAL DE LA DEFENSA DESDE EL INICIO DE LA
PANDEMIA
El 3 de febrero de 2020 se convocó la Comisión de Seguimien-to
de Epidemias para elaborar un «Procedimiento de Actuación
frente a la infección por el nuevo coronavirus (2019-nCoV)» en
nuestro hospital, basándose en las evidencias científicas y en las
recomendaciones de los protocolos vigentes en cada momento del
Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias del
Ministerio de Sanidad y de la Dirección General de Salud Pública
del Gobierno de Aragón. Dicha Comisión se ha reunido en veinte
ocasiones desde febrero hasta la fecha y ha procedido a la actuali-zación
en once ocasiones del procedimiento de actuación en nues-tro
hospital, según las distintas fases de progresión de la pandemia.
La Comisión, compuesta por personas pertenecientes a to-dos
los servicios principalmente implicados en la pandemia (di-rección
del hospital, urgencias, intensivista, internista, microbio-logía,
farmacia hospitalaria, enfermería, veterinaria, prevención
de riesgos laborales, sección económico-administrativa y medi-cina
preventiva), ha liderado la actuación del hospital desde el
inicio del estado de alarma. Para ello, ha garantizado el desa-rrollo
de todos los procedimientos de actuación, la flexibilidad
y dinamismo de trabajo y la resolución de problemas que han
surgido en cada momento.
Nuestro hospital, por ubicación, presta sus servicios a la po-blación
de tres áreas del Sector II de Zaragoza, donde residen
habitualmente gran número de pacientes mayores que viven en
Residencias. Como ya hemos visto, este personal es especialmen-te
vulnerable a la infección provocada por el coronavirus, lo que
ha generado una alta demanda de pacientes con COVID-19 lle-gados
a nuestro hospital, a través del servicio de urgencias.
El objetivo principal de la Dirección del Hospital ha sido ase-gurar
la protección de la salud del personal sanitario y mantener
su capacidad operativa para garantizar la continuidad de la acti-vidad
asistencial ante el aumento de flujo de pacientes ocasiona-dos
por la infección por COVID-19.
Se procedió a la sectorización del hospital con tres propó-sitos;
minimizar la exposición a la infección por coronavirus,
optimizar los recursos humanos y materiales y mantener la ca-pacidad
de respuesta del sistema sanitario. Para ello, fue esencial
la coordinación e integración de todo el personal sanitario y no
sanitario del hospital. Gracias a dicha sectorización, en el hospi-tal
se logró el necesario refuerzo a nivel estructural, aumentando
el número de camas, de 97 a 189. En este proceso los hechos más
significativos fueron:
– Se habilitó una Sala de aislamiento exclusivamente para
pacientes sospechosos de infección por coronavirus SARS-CoV-
2 en el servicio de urgencias.
– La zona de hospitalización quedó dividida en dos alas
(Norte y Sur). Habilitando el ala SUR con cuatro plantas opera-tivas
(dos activas y dos en reserva), para pacientes sospechosos
o confirmados de infección por COVID-19. En estas plantas se
184 Sanid. mil. 2020; 76 (3)
crearon esclusas para la adecuada puesta y retirada de los Equi-pos
de Protección Individual (EPI’s).
– La UCI se destinó exclusivamente para pacientes CO-VID-
19 (5 camas con su correspondiente esclusa) y se creó una
UCI en la Unidad de Reanimación y cuidados críticos (REA) en
el área quirúrgica para pacientes NO COVID-19 con 4 camas.
– Se reservó un quirófano exclusivamente para intervencio-nes
quirúrgicas de urgencia de pacientes COVID-19.
– Se facilitó el reconocimiento médico del personal sanita-rio,
garantizando el seguimiento y redistribución del personal
especialmente sensible y vulnerable de nuestro hospital. Lo que
permitió que este personal pudiera ejercer su labor en la zona
NO COVID junto con el personal militar en la reserva que vo-luntariamente
se incorporó al hospital.
– Todo este proceso requirió un esfuerzo especialmente im-portante
de los servicios no sanitarios (seguridad, limpieza, man-tenimiento,
restauración e informática) para garantizar la rápida y
adecuada puesta en marcha de la nueva distribución del hospital.
– El servicio de psicología impartió charlas y consejos sobre
protección psicológica y gestión emocional en el contexto de la
crisis del COVID-19.
En paralelo a todo este proceso de sectorización, en el hos-pital
se hizo hincapié en poner en práctica todas las medidas de
prevención y control de la enfermedad. Como medida inicial, se
formó debidamente al personal sanitario a la hora de utilizar los
EPI´s según el nivel de riesgo del procedimiento realizado. Pues-to
que, esta medida se considera fundamental para garantizar
la seguridad de todos los trabajadores del hospital, el servicio
de prevención de riesgos laborales (PRL) impartió diariamente
formación sobre la puesta y retirada de EPI’s. Asimismo, para
afianzar este proceso se procedió a la distribución de pictogra-mas
donde se reflejaba el equipo apropiado a utilizar por los tra-bajadores
del hospital, según el procedimiento a realizar. Con
el objetivo de alcanzar la máxima difusión posible sobre el uso
de los EPI’s, se grabó un video informativo de puesta y retirada
de EPI’s e higiene de manos, el cual estaba disponible 24/7 en la
página web del hospital. Otra medida fundamental fue la ges-tión
de residuos; que coordinado por el servicio de veterinaria,
impartió charlas informativas de gestión de residuos y garan-tizado
la disponibilidad de envases y la recogida adecuada de
los mismos. Además, proporcionó material y biocidas para la
desinfección de superficies y equipos.
Finalmente, durante la fase de transición de la pandemia8,
se procedió a trabajar en la desescalada de los distintos servicios
del hospital. El objetivo principal de esta fase fue detectar de
forma precoz los casos positivos para disminuir la transmisión
de la enfermedad y recoger información epidemiológica indivi-dualizada
de casos COVID-19 positivos. Además, de realizar la
identificación y seguimiento de contactos de casos confirmados.
Se adoptó nuevamente la distribución original del área de
hospitalización y de las dependencias del hospital, para empezar
a trabajar dentro de la «nueva normalidad», con las siguientes
indicaciones específicas:
– Mantener la sala de aislamiento de pacientes con sintoma-tología
compatible con COVID-19 en el servicio de urgencias.
– Recuperar el nivel asistencial normal en consultas exter-nas
siguiendo los protocolos de actuación para la prevención del
SARS CoV-2 según el tipo de procedimiento a realizar.