Hace medio siglo nació nuestra industria Aeronáutica ALFREDO KINDELÁN Teniente General de Aviación Nnuestra Aviación, nacida como todas las coetáneas, de la Aerostación en 1911, adquirió, desde sus comienzos, un desarrollo muy rápido. En este año, volaron, en el Aeródromo de Cuatro Vientos a partir del mes de abril, varios aviones extranjeros, en los cuales aprendimos a volar cinco oficiales de Ingenieros, pilotos de globo libre o de dirigible. Al año siguiente, 1912, volaban en el Aeródromo de Getafe aviones nacionales, proyectados y construidos por español. Conservo vivo en me memoria el recuerdo de aquellos vuelos que presencié hace cincuenta años, poco después del vuelo de Vedrines, ganador de la carrera París-Madrid. De todos modos, por si mi memoria fallase y para precisar fechas y detalles, he celebrado interesantes conversaciones con uno de los inventores de aquellos aeroplanos: el inspector general de Caminos José Barcala, quien me ha suministrado las interesantes fotografías que ilustran este artículo, así como un número de la revista “Nuevo Mundo” del mes de noviembre de 1912. Gracias a tan preciosa colaboración, he conseguido redactar este artículo, sobre una efeméride importantísima de la Historia de la Aeronáutica Española que, a juicio mío, sería lástima quedara inédita o carente por lo menos de una versión auténtica y poco documentada. En mi calidad de testigo presencial y amigo de los inventores de aquellos primeros aviones nacionales, he podido salvar del olvido la génesis y desarrollo de un acontecimiento trascendental para la Aviación española: el nacimiento de su industria. Mi labor ha sido facilitada por mi amistad y trato sostenido con los dos inventores, que me ha permitido seguir paso a paso la evolución cerebral de La Cierva, que le ha llevado a concebir el ala rotatoria, y de ésta surgió el autogiro, genial invento que nadie ha podido disputar a La Cierva ni a España; cuyo progresivo desarrollo vino a truncar una muerte prematura, cuando más prometía la capacidad creadora del sabio compatriota. *** ¿Cómo tuvo lugar y cuál fue la génesis de este acontecimiento, portante en la historia de la Aviación española? Desde 1908 o 1909, el joven estudiante Juanito Cierva (de 13 años de edad), llevado por la afición irrefrenable a la naciente aviación, dedicaba todo su tiempo libre –y alguno que no debía serlo– a construir modelos de planeadores y de aeroplanos con motor de gomas. En este absorbente entretenimiento, le acompañaba, con entusiasmo análogo, su amigo y paisano José Barcala, de un año menos de edad. De estos juguetes, pasaron a construir rudimentarios planeadores, capaces de dar algún salto, sosteniendo el reducido peso de sus constructores, o el de algún hermano o amigo. Pero como estos artefactos no podían ser hechos en casa y requerían conocimientos y práctica de buena carpintería, se unió a la pareja otro joven –Pablo Díaz–, de poca más edad, cuyo padre había montado el primer taller de carpintería mecánica que se instaló en Madrid (calle de Velázquez, esquina a la de Villanueva). Esta juvenil asociación, creada sin ninguna formalidad legal, no llevaba el menor afán de lucro; su capital no era otro que los padres de Cierva y de Barcala, y el uso medio gratuito de la carpintería de Díaz. Sin embargo, como dice bien el profesor ingeniero aeronáutico José Fernández de Bobadilla en su opúsculo “La técnica aeronáutica en España” (Ed. Dossat, 1950), “realmente con esta flamante sociedad empieza la era de la verdadera industria”. Durante muchos meses, los tres amigos, creyéndose “pioneros” de la nueva actividad, practicaron el arte y experimentos de Lilienthal, Chanute, los hermanos Wright y demás precursores del vuelo con alas. Los desmontes del Cerrillo del Sastre, frente al antiguo Hipódromo, los de Ciudad Lineal y hasta los montones de sal de las salinas de Torrevieja, fueron testigos de sus saltos, pequeños vuelos y peligrosos batacazos, que estuvieron a punto de ter- PUBLICADO EN NOVIEMBRE DE 1962, NÚMERO 264 996 REVISTA DE AERONÁUTICA Y ASTRONÁUTICA / Diciembre 2013
REVISTA DE AERONAUTICA 829
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