Valores 91 Lo que llevamos por delante toria de España, la Artillería forma un capítulo muy destacado compuesto por millares de páginas ilustres. Páginas que relatan también las hazañas militares de quienes nos antecedieron en el campo de batalla, que nos hablan de la toma de Málaga durante la Guerra de Granada, de la batalla de Bailén o la de las Colinas de San Juan en Cuba enfrentándose a la artillería norteamericana del entonces capitán Theodore Roosevelt… Muchas son las gestas en las que la Artillería española desempeñó un papel decisivo. Desde Fernán Gutiérrez de aquella que nació al calor de la pólvora, tenemos que coincidir con el capitán Ramón de Salas quien afi rma, en su Memorial Histórico de la Artillería Española, que “la pólvora y la artillería se conocieron y usaron en España antes que en parte alguna de Europa”. Fiel refl ejo de que nunca perdimos la ocasión de hacer Historia. A efectos de recordar, está documentado el empleo en España de la artillería, con pólvora, en el siglo XII en el famoso sitio de Niebla. Fundamental fue después su uso para que los Ejércitos de la Reina Católica reconquistaran Granada; la artillería ayudó, así, a la unidad de los reinos de España y contribuyó después a que permanecieran unidos formando el primer gran Estado moderno de Europa. Ningún señor feudal pudo armarse con artillería, privilegio ... la Academia simboliza lo mejor de nuestro pasado, incluso como Nación creadora, de nuestras mejores gestas y tradiciones, que abarcan también aquellas anteriores al hecho puntual del nacimiento del Real Colegio de Artillería vilegio que quedó reservado, como su última razón, al “poder” exclusivo de los reyes. Y lo recordó el Cardenal Cisneros, en su calidad de Regente de Castilla, a la nobleza española mientras señalaba los cañones en el patio de la Universidad de Alcalá de Henares: “Estos son mis poderes”. Y sin duda, mereció la pena desmochar al fuego del cañón las altas torres del poder feudal y, al derribarse las murallas de la nobleza rebelde, la España unida ensanchó sus horizontes y el mundo se pudo abrir a otro nuevo que hoy llamamos América. Todo ello nos lleva a poder afi rmar, y además sin ambages, que en la his
MEMORIAL ARTILLERIA JUN 2012
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