SECCIONES FIJAS de Washington en San Luis han empezado a desarrollar un «cibor-saltamontes» que tendría la capacidad para detectar explosivos. El motivo por el que basan sus experimentos en los saltamontes es porque estos insectos tienen un fino sentido del olfato y pueden identificar olores que pueden estar mezclados o «escondidos» entre otros aromas, lo que significa que incluso olores enmascarados con otros olores pueden ser detectados por los saltamontes. La forma que los investigadores han ideado para aprovechar las facultades de los saltamontes es la de colocarles sensores electrónicos y seguir su actividad cerebral según se muevan en uno u otro ambiente y de ahí tratar de descifrar los diferentes olores y su significado. Los investigadores también colocarán en las alas un dispositivo generador de calor que les permita controlar al saltamontes y guiarlos en la dirección deseada. Según los miembros del equipo, el sistema olfativo de los perros sigue estando a la vanguardia de los sistemas usados en la detección de explosivos y en el diagnóstico médico. Las dificultades y el tiempo necesario para su entrenamiento y las condiciones de los saltamontes, combinados con la falta de un procedimiento de decodificación para extraer la información química de los sistemas biológicos son un desafío significativo para una aplicación más amplia. «US Government Developing Bomb Detecting Cyber Locusts» por Tyler Lee en www.ubergizmo. com R.I.R. REVISTA EJÉRCITO • N. 905 SEPTIEMBRE • 2016 119 entre otras cosas no poder remangarse las mangas del uniforme de campaña. Y eso aunque marines, marinos y miembros del Ejército del Aire no tenían esta restricción y podían recoger sus mangas en los calurosos veranos. Pero por fin, este verano del 2016 será diferente porque el Jefe del Estado Mayor del Ejército de Tierra ha decidido finalmente autorizar el remangarse. Pero la cosa no es tan simple; la manga hay que subirla en la forma correcta. Y el Ejército se ha tomado su tiempo para decir exactamente cómo ha de hacerse. Lo primero es que el dibujo del camuflaje quede visible en su anverso. Esto se ha decidido después de consultar a casi 55.000 personas de las que un 62% estuvieron a favor de esta idea. También esto significa que al remangarse lo que debe quedar visible es el puño. Pero, ¿hasta qué altura?; pues no más de 3 pulgadas por encima del codo, y desde luego que no por debajo del mismo. («The Army’s Extremely Specific New Guidelines for Rolling Your Shirt Sleeves» by Jonathan Evans en www.popularmechanics.com) SALTAMONTES DETECTORES DE EXPLOSIVOS Hasta ahora, cuando se trataba de detectar explosivos siempre hemos pensado en el perro como el animal mejor entrenado para oler y detectar las sustancias explosivas. Es cierto que los israelitas han experimentado con ratas por ser también animales con una alto poder olfativo. Sin embargo parece que los norteamericanos tienen la esperanza de crear algo más eficiente y es por lo que un grupo de ingenieros de la Universidad
EJERCITO DE TIERRA SEPTIEMBRE 2016
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