Page 51

REVISTA GENERAL DE MARINA JULIO 2016

TEMAS GENERALES El empleo ocasional de estas naves por parte de los reyes castellanos para apoyar desde el mar la conquista de varias plazas costeras musulmanas tuvo sus estampas más emblemáticas con la toma de Cartagena en 1245, con la ayuda de una flota montañesa a cargo de Roy García de Santander, o con la conquista de Sevilla en 1248 gracias a la intervención de la flota bajo el mando de Ramón Bonifaz, que derrotó al enemigo cuando pretendía impedirle remontar el Guadalquivir y que rompió el Puente de Barcas, por cadenas aferrado entre Triana y la ciudad, permitiendo abrir una brecha en el dispositivo defensivo, que facilitó a Fernando III conseguir una de sus más grandes victorias y dio a Santander, y a alguna otra villa costera como Avilés, el motivo de su escudo. Sin embargo, fue en el siglo XIV cuando la fuerza de lo que se había convertido ya en la Hermandad de las Marismas, al extender la unión marítima montañesa a los puertos vascos más importantes en 1296, empezó a levantar ampollas en pretendidos rivales europeos, muy particularmente en Inglaterra, que tras algún que otro encontronazo y al mando del mismísimo rey Eduardo III acabó por masacrar a la flota comercial castellana de Carlos de la Cerda en Winchelsea, en 1350. Acabada la tregua a la que aquella batalla dio lugar, el rey de Castilla, Enrique II, se valió de la Hermandad para apoyar con sus escuadras la causa 50 Julio


REVISTA GENERAL DE MARINA JULIO 2016
To see the actual publication please follow the link above