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Revista General de Marina 270_1

Vapor Miguel M. de Pinillos El vapor Miguel M. de Pinillos fue construido en los astilleros de J. Laing en Sunderland (Inglaterra), y se botó en agosto de 1885. Tuvo matrícula de Cádiz y su distintivo de llamada fue HVGO. Como ya quedó dicho, fue el primer barco construido por encargo directo de la Compañía Pinillos. Entre sus características, muchas de ellas citadas en el folleto publicado por el Servicio de Correos con motivo de la emisión de este sello, se pueden citar las siguientes: era de casco de acero, con cubierta corrida de hierro y tres mamparos estancos transversales. Contaba con tanques de lastre con capacidad para 338 toneladas. Medía 109 m de eslora total, 13,79 de manga, 9,43 de puntal y 6,25 de calado. Tenía 3.290 toneladas de registro bruto y 2.198 de registro neto. Podía llevar un total de 550 pasajeros. Para la propulsión contaba con una máquina alternativa de vapor de triple expansión, construida por J. Dickinson, de Sunderland. El diámetro de los cilindros era de 25, 40 y 66 pulgadas, con una carrera de 45 pulgadas. Contaba con dos calderas de ocho hornos y una superficie de parrilla de 44 pies cuadrados. La presión de trabajo era de 150 libras y tenían una potencia nominal de 1.200 caballos. Llevaba una alta chimenea en el combés, con inclinación hacia popa, y su velocidad era de 11 nudos. Como auxilio de la propulsión, de acuerdo con las imágenes de la época, contaba con aparejo de bergantín con dos palos inclinados hacia popa. En el palo de proa o trinquete tenía tres vergas para otras tantas velas cuadras —mayor y dos gavias—, además de un cangrejo hacia popa y dos foques al bauprés o botalón. En el palo de popa o mesana también llevaba tres vergas para dos gavias, ya que la verga baja era seca, y también tenía una cangreja hacia popa y un estay hacia el centro. Era de proa de violín, popa de espejo y puente descubierto. Al centro, en el combés y entre los palos, además de la chimenea llevaba la cubierta de botes salvavidas y varios tubos de ventilación, que eran muy usados en aquella época para ventilar bodegas, entrepuentes y sollados. Tarjeta postal reproduciendo un cartel de la Línea Vida operativa LA MAR EN LA FILATELIA Pinillos. Desde su puesta en servicio navegó en las líneas Pinillos durante más de 30 años sin grandes incidencias y llegó a ganar buenos fletes durante la Primera Guerra Mundial. Dentro de estas actividades, en la época de la emigración canaria a América fue uno de los primeros barcos que entró en la bahía de Santa Cruz de La Palma. Lo hizo el 28 de octubre de 1875 en su viaje de Cádiz a La Habana, en el que también efectuó escalas en Las Palmas de Gran Canaria y Santa Cruz de Tenerife. Y junto con otros barcos, durante mucho tiempo fue muy utilizado por la gran emigración de las islas Canarias a Cuba. Así aparecía en anuncios de la época, en carteles, en folletos y en la prensa, como es el caso de un anuncio publicado por el Diario de la Palma a principios del siglo XX que resaltaba las bondades del viaje del barco desde Santa Cruz de la Palma a Santiago de Cuba y La Habana en los siguientes términos: 2016 113


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