Page 69

REVISTA GENERAL DE MARINA AGO-SEPT 2016

EL ARMA AÉREA: PASADO, PRESENTE Y FUTURO. CAMINO DEL CENTENARIO... utilizado por el Gobierno americano para la venta de artículos de Defensa a otros países. Por primera vez aceptaba el DoD un programa en el que los socios de otras naciones tenían prácticamente la misma voz, voto y derecho a veto que los propios Estados Unidos. El resultado final de dicho acuerdo posibilitó que el Harrier II Plus volase por primera vez el 22 de septiembre de 1992 (21). Con el paso de los años y a pesar de algunos desencuentros, la colaboración de la Armada y de la Marina italiana en la JPO consiguió sacar adelante una de las mejores y sin duda la más versátil plataforma aérea de los últimos años. Las capacidades que actualmente proporciona a la Flota el sistema de armas del Harrier II Plus son envidiadas por la aviación naval de muchas naciones. Ya avanzado el programa, el Reino Unido intentó sumarse a la JPO en el año 2003, cuando se estaba negociando la renovación del primer acuerdo. Se trató de incorporar al programa las variantes de los Harrier de la RAF, pero la configuración inglesa se había separado demasiado de la mantenida por el programa conjunto, por lo que producir sinergias que abaratasen el mantenimiento de estas unidades fue imposible. En estos complejos sistemas de armas en los que la obsolescencia aparece desde el primer día en el que sale un producto al mercado, se paga muy caro «ser diferente», ya que toda iniciativa encaminada a mejorar la adquisición de los repuestos o a la investigación y desarrollo de cualquier modificación se encuentra supeditada a la economía de mercado y al número de unidades a producir. Los malos resultados del intento de acoger en el programa las unidades de la RAF hicieron que solamente seis años más tarde, el 24 de noviembre de 2010, se produjese el último vuelo de un GR-9 desde la cubierta del portaaviones HMS Ark Royal; la Royal Navy carece desde entonces de ala fija embarcada (22). Como hemos visto, para la Armada y su Aviación Embarcada llegar a la situación actual no ha sido fácil, igual que tampoco lo fue finalizar el año 1939 con más de 100 aparatos y cuatro bases en las que desplegaba la Aeronáutica Naval. Hoy en día, el Harrier II Plus mejora todas las capacidades que aportaba a la Armada su antecesor el AV8-B. El nuevo avión permite operar de noche, lleva un armamento más sofisticado y no tiene la servidum- (21) A nivel nacional y para la gestión de los fondos del programa, el DIGENECO firmó un acuerdo por el cual se cedía a la autoridad contable de NAVAIR la potestad de contratar y efectuar pagos en nombre del Gobierno de España. Todo supeditado al control de la Jefatura del Programa Conjunto. A estos efectos el Programa Harrier en España dependía del presidente de la Gerencia de Cooperación Industrial de la Defensa. (22) En diciembre de ese mismo año, se dieron de baja el resto de Harrier británicos, y un año más tarde, en noviembre de 2011, todos los repuestos aprovechables de los 72 Harrier II británicos fueron comprados por el USMC por 180 millones de dólares, cuando cada uno de esos 72 aviones había costado alrededor de 50 millones. 268 Agosto-septiembre


REVISTA GENERAL DE MARINA AGO-SEPT 2016
To see the actual publication please follow the link above