Page 25

REVISTA ESPAÑOLA DE DEFENSA Nº 307 JUNIO 2014

EUNAVFOR de la Unión Europea, que lleva a cabo la operación Atalanta —en la que España participa con el BAM Relámpago y el destacamento Orión de patrulla marítima—, y la Combined Marine Force 151 de los Estados Unidos. La aguas del Índico están divididas en dos áreas de vigilancia: el Golfo de Adén y la Cuenca de Somalia. El contralmirante Díaz del Río es el coordinador de las tres agrupaciones en la segunda. «En esta zona yo soy quien elabora el plan táctico. Todos operamos prácticamente como una fuerza». AUXILIO EN LA MAR El comandante de la SNMG-2 recuerda que el pasado 30 de abril, «tomando café» con el comandante del Mimbelli a bordo de la F-105, recibieron un mensaje de auxilio de un mercante alertando de la presencia de un esquife cuyos tripulantes portaban ametralladoras. Parecía el inicio de un asalto pirata. «Coordinamos la operación sobre la marcha», señala Díaz del Río. «En- El estado mayor multinacional —abajo— está ubicado junto al CIC, el centro táctico del buque desde el que se controlan todas las operaciones, como las de vigilancia aérea del SH-60B. Contralmirante Eugenio Díaz del Río, comandante de la SNMG-2 de la OTAN «El gran éxito ha sido la coordinación entre las fuerzas multinacionales» EL contralmirante Eugenio Díaz del Río está a punto de cumplir su mandato de un año como comandante de las SNMG-2, una de las dos fuerzas navales que la OTAN mantiene de manera permanente para desplegar en cualquier parte del mundo. Su singladura comenzó en el Mediterráneo durante seis meses y continuó por el Océano Índico donde liderará el dispositivo aliado contra la piratería hasta el próximo mes de julio. «Primero embarqué en la Blas de Lezo, luego en la Álvaro de Bazán y ahora en la Cristóbal Colón», las tres fragatas españolas que en estos meses se han ido relevando como buques insignias de la agrupación aliada.. —¿Por qué ya no hay actividad pirata en el Índico? —El motivo del gran éxito ha sido, y sigue siendo, la coordinación entre las fuerzas multinacionales desplegadas en la zona. Esto nos está permitiendo cubrir un espacio muy grande. Casi en tiempo real sabemos lo que pasa en cualquier lugar. Aunque es complicado, podemos ser avisados de un problema en un barco situado a más de 500 millas y en una media de dos horas (e, incluso, diez minutos en alguna ocasión) tener allí una unidad de la OTAN, de la Unión Europea o de la agrupación estadounidense, ya sea un avión, un helicóptero o un barco. Este es el gran multiplicador del esfuerzo internacional contra la piratería. —¿Colaboran en este esfuerzo los barcos civiles? —Sí. Tenemos una mentalidad conjunta para operar entre nosotros, pero también coordinamos nuestras acciones con esos medios civiles. Cada vez son más los agentes externos a las fuerzas militares desplegados en la zona y la comunidad mercante civil participa en nuestras operaciones. Con sus buques realizamos todo el protocolo de reacción ante un problema, como si se tratase de una fuerza militar más. —¿Cómo valora la participación de España en estos meses? —Nuestro país ha hecho un esfuerzo extraordinario con dos barcos. Por una parte, una fragata como buque de mando en la agrupación de la Alianza Atlántica y, por otra, un buque de acción marítima patrullando en el marco de la operación Atalanta, en la que participa, además, un avión de patrulla marítima desplegado en Yibuti. No creo que ahora mismo haya un país que esté haciendo un esfuerzo tan grande como nosotros. Junio 2014 Revista Española de Defensa 25


REVISTA ESPAÑOLA DE DEFENSA Nº 307 JUNIO 2014
To see the actual publication please follow the link above