Después de dos años en el Galerna, sigo con esa primera impresión de esta gran familia. El trabajo del día a día, tanto en la base como en la mar, se hace muy fácil y en gran parte es gracias al espíritu de submarinista que reina entre todos. Cada uno sabe y se preocupa de su trabajo no dejando nada a la improvisación. La elección de submarinos puede resultar un poco complicada por el desconocimiento que se suele tener de ellos, más allá de las famosas películas que existen al respecto. Sin embargo, las películas tienen su parte de ficción y puedo asegurar que la realidad a bordo de un submarino es mucho mejor y más gratificante que la mejor de las películas de submarinos. Hoy día puedo afirmar con rotundidad que la elección fue acertada, ya que tanto en lo profesional como en lo personal los submarinos están cumpliendo todas mis ilusiones y expectativas. TN. PABLO Fº ORTEGA HERNÁNDEZ OFICIAL DE OPERACIONES SUBMARINO GALERNA BIP 31 LAS MUJERES EN NUESTROS SUBMARINOS Estaba todavía en la escuela, de aspirante a marinero, cuando nos dieron la gran noticia de que después de tan larga espera las mujeres podían por fin embarcar en submarinos. Ahí empezó mi singladura como militar y como submarinista. Ser una de las cinco primeras mujeres que pudieron formar parte de este círculo tan exclusivo, es para mí un orgullo. Fue la mejor elección que pude hacer en mi carrera militar. Los compañeros, después de tanto tiempo, se convierten en familia. Amigos que cuando llegaron eran marineros, ahora son suboficiales y oficiales, y siguen siendo amigos. Es una suerte que el ambiente no cambie aun cambiando de escalafón. Los submarinistas tienen algo, un no sé qué. No sé si será por los largos días confinados, por las vivencias vividas, o porque he tenido la gran fortuna de encontrarme en el camino con personas fantásticas, que han hecho de mis andanzas en este mundo un periplo inolvidable. Aunque pasen los años y los cambios de destino, nos obligan a ausentarnos de la «gran familia submarinista»; cuando regresamos, nos reciben con los brazos abiertos y es como si nunca te hubieses ido. Los superiores aun después de muchos años, te recuerdan y los recuerdas con cariño. Pudiendo contar con ellos ante cualquier adversidad. Tengo fantásticos y maravillosos recuerdos de mis quince años de servicio. Recuerdo con mucho cariño a mis primeros compañeros, con los que tengo un trato excepcional. CABO 1.º LIDIA LLOR GUIRAO E.M. DE LA FLOTILLA DE SUBMARINOS FORMA PARTE DE MI VIDA Ser submarinista forma parte de mi vida. Un submarinista «nace o se hace»; la realidad es que el submarinista tiene ese espíritu, trabajar en equipo día a día donde todos los miembros de la dotación forman uno, donde el alto nivel de adiestramiento y la confianza entre todos los miembros de la dotación es sin duda alguna una constante y, aunque el trabajo a bordo es verdaderamente sacrificado y duro, siempre se siente el apoyo de una gran familia lo que hace sentirte verdaderamente especial y disfrutar de momentos verdaderamente inolvidables. CBO 1.º ALEJANDRO GETINO CARBAJO SUBMARINO S-73 MISTRAL
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