Page 22

REVISTA DE HISTORIA MILITAR 114

LA INTELIGENCIA MILITAR EN LA PENÍNSULA IBÉRICA... 25 sen perseguir y contraatacar victoriosamente46. Durante la siguiente década, la red de vigilancia continuó siendo de vital importancia. Mecanismos alternos de adquisición de inteligencia militar Hasta este momento, nuestra discusión se ha centrado en metodologías que, a pesar de tener la capacidad para proporcionar información concreta, se pueden considerar oficiales o quizá visibles. En otras palabras, lo que se observa desde una torre o lo que averigua un escucha y se envía hacia el resto del reino, los mensajes de un emisario en territorio extranjero a su comandante o soberano en su país nativo, y muchos otros tipos de información, ciertamente tienen el potencial para ser de índole confidencial, pero claramente la fuente es conocida. Harto difícil sería esconder un fortín o castillo, o no saber quién es un diplomático si este último ya se había presentado como tal con las credenciales apropiadas. Sin embargo, además de estas, también se utilizaban otra serie de fuentes de inteligencia alternativas que podemos caracterizar como secretas, ya que los monarcas y comandantes se esmeraron en mantenerlas así. Entre estas podemos incluir el uso de espías, mensajes o reuniones secretas, la captura de prisioneros, la interceptación de comunicaciones enemigas, ya sea como parte de la intriga, la captura de combatientes enemigos en tierra o mar, la desinformación del enemigo y operaciones clandestinas. El vocablo espía existía ya en las lenguas ibéricas durante este período, aunque el término barrunte era mucho más común, lo que indica que existía consciencia de lo que significaba ser espía o espiar47, pero sus funciones no se diferenciaban tan estrictamente como lo hacemos hoy en día de las de un escucha, centinela o mensajero48. En parte esto era a propósito, ya que el mejor espía es el que nunca es descubierto. Los mejores candidatos para desempeñarse en este campo eran aquellos individuos que poseían conocimiento del área o áreas en cuestión y de la lengua local y que tenían la habilidad o licencia para desplazarse con relativa facilidad de sitio a sitio. Por eso, los mercaderes eran idóneos para estas faenas, ya que en el proceso de hacer negocios podían tomar nota de las condiciones locales y luego 46  Crónica de Alfonso onceno: op. cit., vol. I, pp. 239-42, 245-46, 248-52, 257-58, 299- 302. 47  Las siete partidas del rey don Alfonso el Sabio cotejadas con varios códices antiguos. Ed. Real Academia de la Historia, Madrid, 1807, Partida II, Título XXVI, Ley XI, vol. II, pp. 281-82. 48  PRESTWICH, Michael: Armies and Warfare in the Middle Ages. The English Experience. Ed. Yale University Press, New Haven, Connecticut, EE. UU., 1996, p. 211. Revista de Historia Militar, 114 (2013), pp. 11-40. ISSN: 0482-5748


REVISTA DE HISTORIA MILITAR 114
To see the actual publication please follow the link above