costumbres y diferentes maneras de entender la vida. Este aparente simple motivo ha sido y seguirá siendo el origen de revueltas, atentados y emboscadas sobre dichos ocupantes que, sin llegar a constituir fuertes enfrentamientos armados, obligan a adoptar grandes medidas de protección, con el consiguiente retraimiento de capacidades, graves restricciones de movimientos y hasta la salida apresurada de dichos territorios (las dos guerras del Golfo y las últimas misiones en Afganistán). Es precisamente la importancia de este factor la que, oficialmente, ahora aconseja la no participación masiva de tropas occidentales en la lucha contra el autodenominado Estado Islámico en Irak y Siria y la que influyó a la hora de la intervención militar aliada en Libia en tiempos de Gadafi. Aunque la discusión sobre este punto podría ser objeto de un largo debate, la realidad es que la mayoría de los aliados y alianzas consideran que deben ser tropas de países cercanos y hermanos las que lleven a cabo las acciones de combate terrestre y la ocupación del 32 REVISTA EJÉRCITO • N. 905 SEPTIEMBRE • 2016 territorio para evitar graves ofensas sobre estos pueblos, sus razas y religiones. Con ello, potencialmente, se pretende evitar que se vuelva a rememorar la afrenta realizada sobre aquellas tierras y gentes durante las famosas Cruzadas y que se pueda alimentar determinadas represalias sobre personas y territorios directamente implicados o no en la contienda. El terreno, aunque parece que no tenga alma, puede favorecer en mucho la capacidad de resiliencia. Sobre él actúan directa o indirectamente factores climatológicos que hacen que varíe grandemente en cuestión de días o de horas. Dichos cambios o trasformaciones pueden favorecer o entorpecer tanto la maniobra propia como las capacidades de reacción incluso del contrario, en peor medida que el del más sofisticado y potente de los armamentos. Baste con recordar que dos de las campañas más importantes en la historia de las guerras mundiales han sufrido los efectos de este fenómeno cambiante y, además, sobre el mismo terreno. Me estoy refiriendo claramente a Rusia y a las campañas de Napoleón y de Hitler intentando su conquista. Ambos, Retirada del ejército napoleónico en Rusia. El ambiente hostil y el clima fueron determinantes de la derrota francesa
EJERCITO DE TIERRA SEPTIEMBRE 2016
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