Page 90

MEMORIAL DE CABALLERIA 83

Doctrina, Táctica y Operaciones primero, ¿cuáles son las misiones diferentes que hoy hacen las brigadas? Prácticamente ninguna, por lo que no me cabe duda alguna que no solamente son iguales las denominadas «pesadas», es que a día de hoy son iguales todas con alguna salvedad de medios. Es cierto que no podemos perder ciertas especialidades al menos en unidades tipo batallón, pero realmente hoy no existe apenas diferencia entre brigadas. Y para corroborar esta afirmación no hay más que recordar cómo el Es-tado Mayor tuvo en su día que «inventar» la diferencia entre un batallón mecanizado y un batallón protegido, cuestión que dejamos al estudio del lector. Además los nuevos escenarios nos llevan a que no solamente todos vamos a caballo, es que todos vamos en caballo de oficial, si se me permite la expresión. Escenarios iguales, misiones idén-ticas y todos, llamándonos como sea, participando en ellas. Nuestro carácter español y nuestra his-toria hace que todos tengamos que estar allí para repartir riesgos y sobre todo gloria. Ya ni siquiera importa si los componentes de tal o cual unidad de maniobra llevan un emblema diferente o una especialidad distinta. Probablemente tendrá que ser así. Ya en 1993 escribimos en esta misma re-vista (Memorial n.º 35) que quien de verdad tenía que ser polivalente era el nuevo soldado que se avecinaba. A pesar de todo, el Arma ha salido reforzada al menos con los perfiles de carrera de los tenientes coroneles, ya que el número de unidades con posibilidad de mando se ha elevado de forma notoria y disponiendo de sus medios de mando y apoyo. EPÍLOGO Sin embargo, a pesar de mis razonamientos tra-tando de justificar la medida, sé de muchos compa-ñeros que han luchado por nuestra Brigada hasta la muerte; y no solamente los entiendo sino que además estoy de acuerdo con ellos, lo cual parece ser una pa-radoja insoluble y un contrasentido conmigo mismo. Y es que en el fondo la Caballería, como institu-ción, es muy recelosa a estos cambios, porque obser-va como sus unidades emblemáticas desaparecen a cambio de que nombres funcionales muy asociados a la Infantería permanecen. Es decir, no nos cabe duda que llamar brigada de montaña, paracaidista, aerotransportable o legionaria es decir Infantería sin nombrarla. Y eso sí que duele al jinete, aunque solo sea porque la Caballería no es ninguna especialidad por muy fundamental que sea: es una institución se-cular muy por delante de las especialidades. Sin embargo creo que hay un problema institucional «grave» al que habrá que dar solución, pues la existente no se sostiene, aunque me consta que se ha evaluado minuciosamente por los organismos correspondientes. Aunque el regimiento haya perdido su carácter táctico, institucional-mente no puede ser de dos armas diferentes, que es lo mismo que no ser de ninguna. No pueden existir Cuerpos de nada y no creo que someter a votos si en la bandera o estandarte de un regimiento de este tipo debe poner Infantería, Caballería o algo nuevo sea solución alguna. No puede ser que la existencia de cuatro batallones de carros altere tanto al Ejército que nos pueda llevar a constituir una nueva institución que sustituya a la Caballería. Ni siquiera que la complemente. Intégrense los carros en un regimiento de caballería o que sigan siendo un regimiento de infantería, pero las soluciones híbridas son institucionalmente erróneas. Podemos ponernos una venda, podemos alejar el problema para generaciones venideras, pero jamás lo solucionaremos a menos que también nosotros comencemos a pensar que ni las institucio-nes ni los cuerpos armados tienen alma y tradición. 88 Memorial de Caballería, n.º 83 - Junio 2017 La serpiente de la Brigada Castillejos, heredada de Milán, todavía cabalga en 2017 por las calles de Má-laga. Su Banda de Guerra, reorganizada hace quince años, se ha transformado en una «Unidad de Música»


MEMORIAL DE CABALLERIA 83
To see the actual publication please follow the link above