EDITORIAL 2017, un año de retos LA celebración de la Pascua Militar, presidida el pasado 6 de enero por Felipe VI, ha servido de ocasión, una vez más, para reflexionar públicamente sobre la realidad actual y las expectativas de futuro de nuestras Fuerzas Armadas. Dado que la XII Legislatura está iniciando su andadura, y que sólo diecisiete días antes, el 20 de diciembre, María Dolores de Cospedal había expuesto en el Congreso de los Diputados su programa de gobierno como ministra de Defensa, esta reflexión ha adquirido en 2017 un especial significado. En su discurso, Don Felipe ha agradecido a militares y guardias civiles su trabajo diario «al servicio de todos, de nuestra paz y seguridad». Ha destacado la modernización de las Fuerzas Armadas, su apoyo a países en situación inestable y su participación en maniobras y ejercicios combinados en el ámbito internacional, en el que España «se ha consolidado como una referencia en el seno de la Alianza Atlántica». Estos aspectos que ha señalado el Monarca sintetizan el esfuerzo de unas Fuerzas Armadas en continua transformación, presentes en quince misiones en el exterior, donde proyectan la imagen de España como nación comprometida con la paz y la construcción de un mundo mejor, a la vez que aseguran, las 24 horas de los 365 días del año, la defensa de nuestro espacio terrestre, marítimo, aéreo y cibernético, además de prestar a las autoridades civiles la ayuda precisa en casos de emergencia. Oportunamente, el Rey ha pedido «no escatimar esfuerzos por aumentar nuestra capacidad de prevención y de respuesta» ante el terrorismo, la mayor amenaza que afronta hoy el mundo, en particular Occidente, como han puesto de manifiesto la terrible oleada de atentados que ha sacudido Europa en los últimos años —entre ellos los recientes de Berlín y Estambul— o la expansión del Daesh a través de su peculiar califato. En el combate contra el yihadismo resulta crucial el trabajo que están desarrollando militares y guardias civiles en la instrucción de tropas y la seguridad en Irak, así como la participación en otras misiones que encabezan la UE, la OTAN y Naciones Unidas. La transformación y la modernización de las Fuerzas Armadas deberán continuar en el recién iniciado 2017, que viene cargado de retos. Para atenderlos, María Dolores de Cospedal expresó en la Pascua Militar su voluntad de trabajar para que los Ejércitos cuenten en todo momento con los recursos materiales adecuados para su misión, de manera que la sostenibilidad de las FAS quede «por encima de posicionamientos políticos y de ideologías»; un impulso al desarrollo del modelo de enseñanza y de la carrera de tropa y marinería; la puesta en marcha de un plan integral de apoyo a la movilidad y de conciliación de la vida personal, familiar y profesional… Todos estos asuntos requieren del «diálogo constructivo» que la ministra de Defensa ofreció en el Congreso a todos los grupos políticos, pues sólo desde el consenso y el respaldo a su labor las Fuerzas Armadas podrán seguir mejorando para prestar un servicio cada día más útil a la sociedad. RED Enero 2017 Revista Española de Defensa 5
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