Page 138

REVISTA_GENERAL_DE_MARINA_JUL_2017

TEMAS PROFESIONALES fue puesta de manifiesto por el estratega estadounidense Alfred Thayer Mahan. Además, la evolución en curso en este dominio se verá influida por el desarrollo de tendencias, como la situación económica, la evolución demográfica y el desarrollo tecnológico. En primer lugar, el previsible resurgimiento de áreas de influencia geoeconómicas que podrían llegar a imponer restricciones comerciales en base a un concepto de «suma cero» entre los diferentes actores tendría una gran influencia en un dominio que alberga gran parte de los flujos comerciales internacionales. En la actualidad, los flujos comerciales intrarregionales superan en importancia a los interregionales. El 71 por 100 del total del comercio marítimo en Europa se desarrolla entre países europeos, en Asia constituye el 53 por 100 del total y el 49 por 100 en Norteamérica. Sin embargo, este fenómeno es menos evidente en Latinoamérica, Oriente Medio y en la Comunidad de Estados Independientes. A medio plazo, influirán en estos flujos las tendencias geopolíticas, convirtiéndose Asia en el centro de gravedad del comercio marítimo sobre la base de los flujos comerciales intrarregionales e interregionales entre Asia con Oceanía, Latinoamérica y Oriente Medio. Ahora bien, un somero análisis de uno de los múltiples productos que se mueven cada día a través de los mares y océanos, como el crudo, ilustra la vulnerabilidad del transporte marítimo: de los 86 millones de barriles de petróleo que se transportan diariamente, unos 40 millones van a través de rutas marítimas conocidas, algunas de ellas fáciles de interceptar por parte de actores estatales y no estatales. Esta potencial vulnerabilidad requiere el fomento de la colaboración entre organizaciones y países concernidos. En este sentido, el fomento y la mejora de la coordinación entre agencias dentro de los Estados, el desarrollo de acuerdos, protocolos y convenciones internacionales relacionadas con el dominio marítimo y el incremento de la formación han sido dinámicas que se han mostrado como altamente efectivas durante los últimos años. En segundo lugar, la evolución de la demografía afectará al dominio marítimo. El crecimiento de la población contribuirá a un incremento estimado para 2030 del 40 por 100 en la demanda de energía. Este aumento será enfrentado en gran medida gracias al empleo de fuentes energéticas autóctonas, entre las que se encontrarán la energía eólica marítima y la de los mares —la transportada por las olas del mar, las mareas, las corrientes— y la generada por la diferencia térmica entre la superficie y el fondo marino. Así, el libre acceso a los recursos marinos, la libertad de navegación y la adecuada protección del comercio marítimo son pilares fundamentales no solo para alcanzar un dominio marítimo seguro y estable, sino también para asegurar gran parte del desarrollo y prosperidad de nuestras sociedades, lo que confiere una nueva dimensión estratégica a este dominio. En tercer lugar, el desarrollo tecnológico también influirá de forma notable en la evolución del dominio marítimo. De forma general se puede afirmar que durante el siglo XXI las principales evoluciones en las capacidades de las flotas 2017 137


REVISTA_GENERAL_DE_MARINA_JUL_2017
To see the actual publication please follow the link above