Page 97

REVISTA HISTORIA MILITAR EXTRA II 2017

96 PABLO GONZÁLEZ-POLA DE LA GRANJA dice Fernando Fernández de Córdova, “algo ofendido porque no se le oía quizá con toda la predilección que merecían sus consejos”32. Comienza aquí un desafecto con la causa de María Cristina, probablemente por las diferencias, que no sólo él, sino otros generales mantenían con Fernando Muñoz, el esposo de la ex reina. No obstante, y debido a su prestigio y su condición de superioridad jerárquica sobre sus compañeros de armas, fue elegido para presidir la sociedad secreta creada para conspirar contra Espartero, conocida con el nombre de Orden Militar Española. Además de generales como Narváez, Pezuela, Pavía, el conde de Clonard o los hermanos Concha, entre otros, también había hombres civiles importantes como Alcalá Galiano, Martínez de la Rosa, el conde de Toreno, Escosura o el duque del Infantado33. Se preparaba la gran conspiración contra el regente Espartero, en el que el protagonismo de Narváez era evidente según nos cuenta Fernando Fernández de Córdova, observador de excepción desde el comité directivo de la conspiración. Por él sabemos del retraimiento paulatino de don Leopoldo, quien se mostraba “indiferente y frío, y había manifestado, desde un principio, que sus aspiraciones se limitaban a ejercer el gobierno superior de Cuba, reservándose sólo el mando de Navarra y de las Provincias Vascongadas para el día del triunfo”34. De esta forma quedaba expedito el campo de promoción del general Narváez, lo que muestra, en este momento, las diferencias entre las actitudes de los hombres de armas, que inician el periodo de acceso a la jefatura del Gobierno. Por una parte, el regente Espartero se afianzaba en el poder dando cada vez más síntomas dictatoriales, ya hemos visto como Narváez prepara la conspiración con visos de ocupar la silla que, una vez desalojado, dejaría don Baldomero. Por su parte, el general Serrano había ingresado en el partido progresista y ocupaba un escaño de diputado a Cortes, habiendo votado a favor de la regencia de Espartero. Pero como dice su principal biógrafa, la profesora Ortuzar, Serrano se va distanciando cada vez más del Regente por sus tendencias dictatoriales35, hasta el punto que, acuciado ante las informaciones de los conspiradores moderados en el exilio francés, inicia Serrano su propia conspiración contra Espartero, apoyado por un grupo de progresistas. También Prim se une a los moderados contra el Regente. De modo que, a punto de ser expulsado de 32  FERNÁNDEZ DE CÓRDOBA, Fernando, Mis memorias íntimas (edit. 1866), T.II, Velecio Editores, Madrid, 2007, p. 180. 33  MARTÍNEZ GALLEGO, Francesc: “O´Donnell”, ob. cit. p.210. 34  FERNÁNDEZ DE CÓRDOBA, Fernando, Mis memorias íntimas, ob. Cit. p. 186. 35  ORTUZAR, Trinidad, “Serrano”, en RUEDA, Germán (edit.), Los generales de Isabel II, Ediciones 19, Madrid, 2016, p. 279. Revista de Historia Militar, II extraordinario de 2017, pp. 96-122. ISSN: 0482-5748


REVISTA HISTORIA MILITAR EXTRA II 2017
To see the actual publication please follow the link above