TEMAS GENERALES vista parcial del barrio de pera. (fuente: www.istambul-constantinopla.culturalspot.org). Antes de que el alférez de navío Manuel Calderón diera orden alguna, el segundo contramaestre José fernández ya se había adelantado en mover a la marinería. A los tres minutos de desembarcar, la columna estaba formada con su armamento y uniformes recompuestos y arrancaba hacia el alto de Taksim. Atravesaron, rápidamente, en dirección noroeste y a través de una calle estrecha, el barrio turco pegado al agua y accedieron al Bulevar Ayas pasha. Dejaron la embajada alemana a la izquierda y el cementerio armenio a la derecha. El teniente de navío Ribera no pudo dejar de pensar que un kilómetro al norte, en el cementerio católico, se encontraban enterrados los tres miembros de la dotación fallecidos en la comisión: José Teijido yáñez (artillero provisional), Ernesto Martínez Chedas (maestre armero) y Ramiro gonzález Romero (marinero de segunda), este último hacía solo dos semanas. Cuando la columna española llegó a Taksim, ya se encontraban allí las fuerzas británica y norteamericana y enseguida llegaron la francesa y la italiana. Cada una de las columnas ocupó su posición de acuerdo con la distribución prevista. La española, frente a la popular y cosmopolita calle de pera. En el centro de la plaza se había colocado un tablado respaldado con sacos terreros. Entre el patíbulo y la puerta del Cuartel de Artillería se agrupaban los componentes del pelotón de fusilamiento en actitud aparentemente distendida. Casi todos fumaban. El teniente de navío Ribera había decidido concederse diez minutos para asimilar las instrucciones de su comandante, así que a las cuatro menos diez, con la plaza ya abarrotada de gente, abrió el sobre y leyó las cinco líneas escritas en la cuartilla. Repasó el texto tres veces y lo guardó. Desde luego, las 424 Abril
REVISTA GENERAL DE MARINA ABRIL 2018
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