entrevista —EL INTA es el único organismo público de investigación y de prestación de servicios tecnológicos del Ministerio, y su trabajo para las Fuerzas Armadas y los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad tiene la máxima trascendencia. Su estatuto le adscribe al Departamento y le especializa en ámbitos de investigación que tienen carácter dual: aeroespacial, aeronáutica, hidrodinámica y de defensa y seguridad. Junto con la Dirección General de Armamento y Material (DGAM), el INTA participa en la mayoría de proyectos de adquisición de los sistemas de armas del Ministerio (avión de transporte A400M, helicópteros NH 90 y Tigre…), y, además, es su principal centro técnico de certificación de aeronavegabilidad. En el ámbito espacial juega un papel fundamental al contar en sus instalaciones con el segmento terreno del satélite Paz, el centro de servicios del sistema Galileo y el centro de monitorización de la seguridad de este sistema, que pronto entrará en funcionamiento en la Marañosa. También, a través de las estaciones espaciales de Cebreros, Robledo de Chavela y Villafranca del Castillo y de su participación en numerosas misiones espaciales, es el enlace del Ministerio con la NASA y la Agencia Europea del Espacio. —¿Se adoptarán medidas para mejorar la condiciones de vida y trabajo de los militares y del personal civil? —Estamos decididos a ello, así como a favorecer la integración de la mujer en nuestras Fuerzas Armadas, que pasa ineludiblemente por la conciliación de la vida personal, familiar y profesional. Hemos elaborado un plan de choque para poner fin al deterioro de algunas instalaciones militares y ya se están realizando las primeras actuaciones, tanto de inversión como de mantenimiento. Las inversiones consisten principalmente en reformas integrales de alojamientos o vestuarios, la modernización o puesta al día de instalaciones deportivas, el despliegue de redes wifi para mejorar la conectividad, sobre todo en las zonas de vida, y el aumento del número de guarderías en nuestros cuarteles. —¿Qué otras iniciativas existen en relación a las infraestructuras? —Estamos elaborando, en estrecha relación con los Cuarteles Generales, el Plan de Infraestructura para el quinquenio 2019-2024, que prevé la racionalización de la infraestructura, la modernización de bases, acuartelamientos y establecimientos y de las instalaciones de formación, la mejora de la calidad de vida, y los avances en gestión y eficiencia energética y protección medioambiental. El escenario económico del plan contempla una inversión de 747 millones de euros, más 481 millones para mantenimiento. Ello debe permitir, a medio plazo, disponer de unas infraestructuras acordes al siglo XXI. —¿Cómo se trabaja para reducir el impacto medioambiental de las actividades militares? —La política medioambiental del Ministerio se basa en el concepto de desarrollo sostenible compatible con las misiones de las Fuerzas Armadas. La herramienta fundamental para conseguir este objetivo es el establecimiento de Sistemas de Gestión Ambiental conforme a la normativa sobre calidad, que permite evaluar la situación ambiental de los establecimientos militares y asegurar la continua revisión y control de los efectos sobre el medio ambiente de una forma clara y efectiva. Hasta ahora se han certificado 160 establecimientos y están en proceso de implementación otros 60. —¿Se puede lograr una mayor cercanía entre los españoles y sus Fuerzas Armadas? —Es una de nuestras metas. La SEDEF colabora en las iniciativas impulsadas por la Subsecretaría, la Secretaría General de Política de Defensa y la Dirección de Comunicación Institucional para promocionar la cultura de defensa en la sociedad española. En mi opinión, la mejor cultura de defensa consiste en difundir el trabajo que, día a día, desarrollan las Fuerzas Armadas. La sociedad demanda transparencia y las administraciones públicas estamos obligadas a proporcionarla, pero, en el caso de la defensa, esto nos aportará indudables beneficios, al percatarse la ciudadanía del esfuerzo desinteresado, la capacidad de sacrificio y la gran profesionalidad de nuestro personal. Hay que seguir haciendo pedagogía para explicar en todos los ámbitos no solo lo que hacen las Fuerzas Armadas, sino cómo y para qué. Si somos capaces de transmitir la realidad, sentiremos a nuestros Ejércitos y Armada como algo propio que actúa para proteger la seguridad y la libertad de todos. Santiago F. del Vado Fotos: Hélène Gicquel Octubre 2018 Revista Española de Defensa 11
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