internacional Treinta años por la paz El próximo mes de diciembre se cumplirán 30 años del inicio de la participación de España en las misiones de paz de la ONU. Desde entonces, los militares españoles (en total han sido 160.000 efectivos) han participado en 50 misiones en cuatro continentes. Tres décadas intensas, fructíferas, complejas que, sin lugar a dudas, han sido parte y consecuencia de la modernización de España y de una nueva razón de ser de las Naciones Unidas. Cuando un 23 de diciembre de 1988 el entonces secretario general de la ONU, Javier Pérez de Cuellar, pedía formalmente al Gobierno español que enviara observadores militares a Angola se iniciaba un viaje sin retorno que ponía fin a una etapa de aislamiento internacional: desde ese momento, los militares españoles, iban a ser protagonista activos de la defensa por la paz y ejemplos del nuevo papel de España en el mundo como agente activo del multilateralismo. Y, por avatares de la Historia, esta incorporación se produjo, además, en un momento en el que la disolución de los bloques abrió las puertas a la constante intervención de las Naciones Unidas. La relajación en el derecho a veto de las grandes potencias permitió aumentar el número y, sobre todo, el mandato de las misiones internacionales. La ONU disponía ya de un instrumento capaz no solo de supervisar la paz, sino también de imponerla (las boinas azules fueron cada vez más veces reemplazadas por cascos legitimados para utilizar la fuerza), gestionar crisis o acudir en ayuda de la población ante cualquier tipo de catástrofe. Y España ha estado allí en muchas, casi todas, las misiones de los últimos 30 años. Fueron siete los primeros oficiales que partieron a Angola en enero de 1989 (UNAVEM I) y apenas tres meses después, en abril, aportamos 250 efectivos, además de ocho aviones Aviocar C-212 y un Hércules C-130, a la misión de asistencia a la transición en Namibia (UNTAG). En África, nuestra contribución a la ONU en estas tres décadas nos ha llevado también a Mozambique (ONUMOZ, de 1993 a 1994), Ruanda (UNAMIR, 1994 a 1997), Sáhara Occidental (MINURSO 1999), República Democrática del Congo (MONUC y MONUSCO, 2001 a 2012), Burundi (ONUB, 2004 y 2005), Sudán (UNMIS, entre 2005 y 2008), Chad-República Centroafricana (MINURCAT, también entre 2005 y 2008), y Libia (UNSMIL, 2011) España demostró que era capaz de liderar una gran misión: el Grupo de Observadores de Centroamérica (ONUCA), que desarrolló su actividad entre 1989 y 1991. Fue la primera misión al mando de un general español y nuestro contingente (57 oficiales) el más numeroso de la operación. Fue, además, la llave que abrió la puerta a una fructífera labor de España como incuestionable interlocutor para la paz en Iberoamérica. En 1990, estuvimos en Haití (UNAVEH), en el Salvador de 1991 a 1996 (ONUSAL), en Guatemala de 1995 a 2003 (MINUGUA) y de nuevo en Haití tras el terremoto de 2010 (MINUSTAH). El giro de tuerca, el momento en el que el mundo y sobre todo Europa, se dio de bruces con una realidad que aniquilaba los sueños de paz surgidos tras el fin de la Guerra Fría fue la guerra de los Balcanes. Las Naciones Unidas tuvieron que pedir soporte militar a otra organización, la Alianza Atlántica, que en coordinación con la ONU realizó su primera operación de combate con bombardeos aéreos. España está en Bosnia-Herzegovina desde 1993 (primero en la misión de Naciones Unidas, UNPROFOR y más tarde en las operaciones de la OTAN y la Unión Europea). Blindados españoles en Mostar (Bosnia-Herzegovina) en la misión de la ONU en la ex Yugoslavia (UNPROFOR), desarrollada entre 1992 y 1995. Pepe Díaz A partir de entonces, la ONU se consolidó como garante de una paz que requería del apoyo de otros organismos regionales y España siempre ha estado dispuesta a participar en cualquier operación tanto de la OTAN como de la UE (somos el mayor contribuyente a las misiones de la de la Unión) que tenga el mandato expreso de las Naciones Unidas. Así, en la actualidad, las Fuerzas Armadas españolas están en 18 misiones en el exterior con 2.900 militares y guardias civiles desplegados. Bajo el paraguas específico de las Naciones Unidas, estamos en el sur de Líbano desde el 2006 (UNIFIL) con 611 militares. Durante los años 2010 y 2011, España lideró esta misión y llegó a tener bajo su mando a 2.500 cascos azules. España también tiene cinco observadores en la misión de Monitorización de la ONU en Colombia. Octubre 2018 Revista Española de Defensa 53
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