Page 43

RED_366

La cabo Carla Míguez trabaja «pie a tierra» con Piamontés, un potro anglo-árabe que aspira a convertirse en semental de la yeguada. ponen la piara de asnos de la unidad ofrecen «una actividad exótica, atractiva y, sobre todo, terapéutica para niños con discapacidad intelectual, a la que se asocian otros problemas físicos, conductuales y psiquiátricos», señala Juan Gómez, fisioterapeuta del Centro de Educación Especial Doctor Arce de la localidad de Torrelavega, cuyos alumnos se benefician de esta iniciativa desde hace tres años. «No es fácil —explica— acceder a una actividad como la Hipoterapia o Equinoterapia», orientada, como es el caso de este centro, «a chavales que presentan movilidad re El caballo de deporte español y el hispanobretón se crían en Cantabria fuerzas armadas partir del 1 de abril, o fuera de ellas el resto del año con el envío de semen a las ganaderías de toda España. El de Mazcuerras es el centro de cría caballar que más cubriciones hace al año. «Alrededor de un millar», puntualiza su jefe. «Tenemos a nuestro cargo 160 animales, incluidos los sementales, machos y hembras de todas las edades, que alimentamos durante todo el año con el pasto que obtenemos de las 85 hectáreas de praderas de Mazcuerras y de las 30 del antiguo Depósito de Sementales de Santander», dice el jefe de la yeguada militar. El nuevo depósito, los establos, los picaderos o el herradero, entre otras, son las instalaciones que se levantan en las 4,5 hectáreas de terreno restante. Todos los años se preña alguna de las burras para mantener la raza zamoranoleonesa. Aunque no se encuentran en peligro de extinción, «no está demás mantener un reservorio genético del animal », dice el teniente coronel Heredia. Más allá de la gestación y la conservación, las seis hembras que comducida (usuarios de silla de ruedas con problemas para mantener el tronco alineado) o con dificultades de atención (TDH)», subraya este especialista que trabaja en el recinto castrense junto a una profesora de Educación Especial. Mazcuerras oferta este servicio todos los miércoles del mes bajo la dirección de los propios militares. Para estimular los músculos y las articulaciones de los niños se utilizan burras «Son más nobles, y con el paso más lento y plano que el de los caballos », destaca el brigada Juan Mañas, uno de los miembros de la sección de Ganado que participa en estas sesiones terapéuticas indicando a los niños los movimientos que deben realizar sobre sus monturas sin perder la concentración, «uno de los principales objetivos de esta actividad», resalta Juan Gómez. «Es genial cuando consiguen mantener la estabilidad al mismo tiempo que atienden las indicaciones. Si se lo explicáramos de una manera racional, no lo entenderían», añade. Noviembre 2019 Revista Española de Defensa 43


RED_366
To see the actual publication please follow the link above