Page 71

Revista de Historia Militar 118

70 JUAN ANTONIO GÓMEZ VIZCAÍNO de diez pies de ancho y una vara de hondo, que con haber quitado la tierra y hondura de dicho foso pequeño no habrá escala que alcance a lo alto de la muralla por grande que sea. Junto a los traveses y casamatas, de los baluartes por la parte de fuera asimismo se hará un foso pequeño por que allí el suelo del mismo foso grande que de presente no está más que señalado con poca hondura, está muy cerca del suelo de las casamatas y si hay algún pedazo de la cortina que corresponde a los antiguones o teatro, que no esté acabada, como me lo parece que se cierre con tapia algún tanto gruesa. Después se recorrerán las murallas por la parte de dentro advirtiendo que estén de tal manera dispuestas, que a los soldados que las defendieren les den a los pechos lo cual se hará en esta manera en las partes de la muralla por de dentro a donde el terrapleno sobrepujare o igualare a la muralla, o no llegare a ella, que dicho terrapleno se ahonde con anchura conveniente hasta que lo alto de la muralla de a los pechos a los soldados que la defendieren y porque en la muralla por de dentro hay algunas partes sin ningún terrapleno de suerte que es tanto lo alto por de fuera como por de dentro que se haga en estas partes por mas brevedad un tablado a manera de corredor todo en torno de las tales partes de muralla sin terrapleno ancho nueve o diez pies, de manera que los soldados puedan pelear sobre dicho tablado, dándoles la muralla a los pechos como las demás a donde hubiere terrapleno y que para poder subir a este tablado por diversas partes haya sus buenas escalas de madera bien fi rmes y con sus pasamanos para la seguridad de los que bajaren y subieren. - Las casamatas como tan importantes para la defensa de todas las murallas se procurará por la parte de dentro de allegarles algún poco más de tierra para que los soldados que hubieren de pelear en ellas tengan un poco de eminencia sobre los enemigos que se llegaren por de fuera a la muralla, estas casamatas están cerradas con unas traviesas de pared delgada desde el principio del orejón del baluarte hasta pegar con la muralla de la cortina de entre baluarte y baluarte, en ellas se harán cinco o seis troneras fáciles para tirar por ellas con mosquetes medianos y grandes a los que se llegaren a la muralla hiriéndolos por través por que no dudo yo sino que con mosquetes se alcance desde el través hasta la punta del otro baluarte y si en alguna casamata hubiere disposición para poder poner alguna pieza de artillería con seguridad, por si hace lo que más conviniere. Adviértase que si pareciere ser mejor hacer alguna tapia sobre la misma muralla a donde su terrapleno estuviere igual a ella, que sirva de parapeto, que se haga pues la costa no será mucho más. Revista de Historia Militar, 118 (2015), pp. 70-76. ISSN: 0482-5748


Revista de Historia Militar 118
To see the actual publication please follow the link above