Page 52

REVISTA HISTORIA MILITAR 116

52 LUIS ALFONSO ARCARAZO GARCÍA Antonio Bastús y Fayá como primer ayudante de Farmacia en la 1.ª División del general Reding, que estuvo presente también en la batalla de Bailén, asistiendo con el botiquín de su unidad a los heridos en el campo de batalla, por lo que sería condecorado con la Cinta y Medalla conmemorativas. El mencionado farmacéutico prestó sus servicios en los hospitales de sangre de Bailén y Baeza, hasta que el ejército se puso en marcha hacia Madrid.89 Y de la Armada hay constancia de que algún cirujano fue destinado a unidades del Ejército, lo mismo que los alumnos del Colegio de Cádiz en calidad de ayudantes de cirujano, aunque de estos últimos no hay constancia de su par-ticipación en la batalla de Bailén, por el contrario, el que sí estuvo presente fue el cirujano 1.º de la Armada Juan Manuel de Aréjula y Pruzet, ya que en 1807 fue designado jefe facultativo de la Junta de Sevilla, perteneciente al Ejército de Andalucía.90 Hay que suponer, que en aplicación de los reglamentos, el Ejército es-pañol contaba con el material correspondiente, pertrechándose previamente para entrar en combate. En este sentido hay un documento que refiere «en lo concerniente a hospitales y demás necesario, para conducción de heridos, les he remitido lienzos para sábanas y vendajes, jergones, pariguelas, carros y acémilas quantas fue tenido a la mano». Lo que sí está bien documentado es la colaboración de los vecinos de Bailén en la asistencia de los heridos es-pañoles, creando por propia iniciativa hospitales de sangre en varias casas. La medicina militar francesa Según refiere Alfonso Ballesteros, el servicio de Sanidad Militar francés era el menos organizado y dotado económicamente del Ejército Imperial,91 aunque sus sanitarios tenían mucha experiencia después de tan-tas campañas por Europa. le Service de Santé” del Ejército Imperial también supeditaba su impedimenta a la movilidad, llevando lo mínimo imprescindi-ble y careciendo de medios de evacuación, dejando este extremo a la impro-visación. Por otra parte, los hospitales de sangre se organizaban en cualquier lugar, como los de los españoles, siempre locales inadecuados, insalubres, 89  Rondán y Guerrero, R.: «Los farmacéuticos españoles en la guerra de la Independencia», discurso leído el 24-I-1947. <http://www.analesranf.com/index.php/discurso/article/viewFi-le/ 1120/1143>. 90  Juan Manuel de Aréjula y Pruzet era profesor de la Cátedra de Materia Médica y Botánica desde 1793 y vicedirector del Colegio de Cirugía de Cádiz. Belaústegui Fernández, A.: op. cit., págs. 80-81. 91  Ballesteros Fernández, A.: «La Guerra de la Independencia y la Sanidad Militar», en Anales de la Real Academia Nacional de Medicina, t. CXXV, cuaderno 3.º, año 2008. Revista de Historia Militar, 116 (2014), pp. 11-72. ISSN: 0482-5748


REVISTA HISTORIA MILITAR 116
To see the actual publication please follow the link above