realizada por soldados de Infantería de Marina. El 5 de junio de 1885 una patrulla de Infantes de Marina, compuesta por un sargento, un cabo y doce soldados, cumplía una misión de vigilancia de la vía férrea de Gibara a Holguín y estaba en Piedras Picadas, en el arroyo de Aguas Claras. Atacada por una fuerza numerosa de insurrectos, consiguió detenerlos durante algún tiempo. La patrulla se retiró, pero cinco soldados quedaron cercados defendiendo con bravura la posición y fueron sucumbiendo hasta quedar solamente los soldados Rama y Cancela que, rodeados de cadáveres, resistieron hasta agotar las municiones y murieron acribillados de heridas de bala y de machete. Su heroico sacrificio dio tiempo a la llegada de refuerzos que pudieron conservar la posición. En este lugar, meses después, fue construido un fuerte para defender el puente sobre el arroyo de Aguas Claras, que por decisión del general Echagüe recibió el nombre de esos dos héroes. Los soldados José Rama Varela y Antonio Cancela Rodríguez, naturales de Larachá y Coristanco respectivamente, pueblos coruñeses de la comarca de Bergantiños, estaban encuadrados en la 2.ª compañía del 2.º batallón del 2.º regimiento, que tenía su acuartelamiento en Ferrol, en el Cuartel de Nuestra Señora de los Dolores. El 4 de mayo de 1895 este Batallón, embarcado en el vapor Santo Domingo, había zarpado del puerto de Ferrol rumbo a Cuba. J. J. P. C. 24.935.—Médico militar, abogado, empresario y político liberal Todo eso y más lo fue el ilustre gallego, general de Sanidad del Ejército y senador vitalicio, don Justo Martínez y Martínez (Santiago de Compostela, 1842- Oleiros, 1930), figura representativa del médico militar español, ilustrado y valiente, de la segunda mitad del siglo XIX y primer tercio del XX, que supo aunar y conjugar en su persona —con notable maestría— su vocación de servicio a España en la milicia y en la política. Los brillantes servicios que prestó en campaña —tomando parte en infinidad de acciones en España y ultramar— serían recompensados con nada menos que cinco ascensos por méritos de guerra (subinspector médico de 1.ª clase —coronel— en 1873 con solamente 31 años de edad) e importantes condecoraciones (entre ellas cinco cruces del Mérito Militar con distintivo rojo y la cruz de María Cristina). En el ámbito de la Armada, se destacó en Ferrol durante la insurrección cantonal de 1872, formando parte de las fuerzas que al mando del capitán general de Galicia, José Sánchez Bregua, intervinieron para sofocar la rebelión encabezada por el brigadier Bartolomé Pozas. Por esa acción se le concedieron las cruces de Carlos III y del Mérito Naval con distintivo rojo. Su carrera médico-militar incluyó numerosos destinos de gran relevancia, como, entre otros, el Parque Sanitario de Madrid y su Sección de Ambulancias, de la cual fue el creador; el MiSCELÁNEA 568 Octubre
REVISTA GENERAL DE MARINA OCTUBRE 2015
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