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REVISTA GENERAL DE MARINA AGO-SEPT 2016

EL ARMA AÉREA: PASADO, PRESENTE Y FUTURO. CAMINO DEL CENTENARIO... dios definidos y nivel de conocimientos a alcanzar para cada tarea de mantenimiento. — El mantenimiento de la aeronavegabilidad de los sistemas aéreos, con requisitos estrictos en su gestión, que deberá ser realizado por una organización diferente de la organización del mantenimiento. No hay duda de que el Arma Aérea deberá avanzar en una adaptación progresiva a esta normativa, a pesar de que la llegada del NH-90 MTTH no se espera hasta 2025, lo que exigirá una revisión de la organización y procesos del actual Segundo Escalón y de los primeros escalones de las distintas escuadrillas, con especial énfasis en la organización del mantenimiento, la gestión de la aeronavegabilidad y la formación del personal. Disponer del personal motivado y capacitado En relación con la formación —y este tema ya enlaza con el tercer reto, que consiste en disponer del personal motivado y capacitado—, hay que señalar que los requisitos de formación y experiencia práctica que impone la normativa PERAM obligarán a revisar algunos aspectos del actual perfil de carrera de los oficiales, suboficiales y marineros con cometidos relacionados con el mantenimiento de aeronaves, de manera que la articulación de la enseñanza de perfeccionamiento, en forma de especialidades complementarias, aptitudes o cursos monográficos, y la progresión profesional, en forma de permanencia en determinados destinos de la Flotilla de Aeronaves y la adquisición de la correspondiente experiencia práctica, garanticen que el personal de mantenimiento de aeronaves cumpla con los estándares de formación y experiencia que establece la normativa PERAM. Por otro lado, y en relación con las dotaciones de vuelo, la Flotilla de Aeronaves disponía, hasta la entrada en vigor de la Ley 39/2007 de la Carrera Militar, de un buen número de oficiales pilotos procedentes de la antigua escala de oficiales. Al desaparecer esta y reducirse el número de oficiales de la escala única, se ha considerado que la apertura de la especialidad complementaria de piloto naval a la Escala de Suboficiales del Cuerpo General y del Cuerpo de Infantería de Marina permite configurar un modelo más sostenible en el tiempo. Este modelo lleva implantado en el Ejército de Tierra con resultados satisfactorios desde hace ya muchos años. En el curso 2016-2017 dos suboficiales empezarán en el Ala 78 de Armilla la especialidad complementaria AVP, y pronto formarán parte, como pilotos, de las distintas unidades aéreas embarcadas, tal como lo hicieron en los primeros años de la Aeronáutica Naval. Por último, habrá que asegurar que las trayectorias profesionales de todo el personal de la Armada que sirve en la Flotilla de Aeronaves son equilibradas y están suficientemente valoradas, ya que es un elemento fundamental de la motivación. 2016 331


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