análisis internacional Athisaari, quien elabora un plan según el cual el statu quo de Kosovo debe culminar en una independencia supervisada por la comunidad internacional. Athisaari considera que no es viable la posibilidad de reintegrar a Kosovo en Serbia, por la larga historia de enemistad y enfrentamiento entre serbios y albanokosovares, y recomienda la independencia tutelada como única opción práctica para proteger a la minoría serbia y distribuir adecuadamente los recursos de la ayuda internacional al conjunto de la población kosovar. La falta de apoyos a la agricultura y la escasa fabricación interna de productos manufacturados, mantienen a la población en unos niveles bajos de desarrollo. De acuerdo con el plan diseñado por Athisaari, el 17 de febrero de 2008, Kosovo proclama unilateralmente su independencia, tras fracasar las negociaciones con Serbia, que no cede en reclamar la soberanía sobre su antigua provincia. La independencia, rechazada por Rusia y China, fue aceptada inmediatamente por EUU y otros países, que en la actualidad son más de un centenar, aunque el reconocimiento internacional no es unánime ni siquiera en la UE. Serbia, por otra parte, recurrió ante la Corte Internacional de en el conflicto al finlandés Martin Justicia la secesión de Kosovo, pero el Gracias a la ayuda exterior, Kosovo se va recuperando de la guerra pero el problema del status político queda sin resolver recurso fue rechazado, ya que el alto tribunal considera que la separación no es contraria al derecho internacional ni vulnera la resolución 1244 del Consejo de Seguridad que autorizó el despliegue de KFOR y el envío de misiones de la ONU para hacerse cargo del control del territorio. SITUACIÓN SOCIAL La mayoría de los observadores políticos coinciden en afirmar que los grupos de poder del naciente Estado han convertido a Kosovo en una especie de feudo en el que proliferan el clientelismo, Pepe Díaz el nepotismo y la corrupción. Una situación que frena el desarrollo económico y la normalización social. El estancamiento político y la incertidumbre económica dañan en gran medida la construcción de una sociedad democrática, y la falta de capital inversor dificulta los intentos gubernamentales de recuperación. La falta de apoyos a la agricultura y la escasa fabricación interna de productos manufacturados, a pesar de la riqueza mineral que en tiempos pasados dio origen a importantes centros industriales, hace que batalla, el entonces presidente serbio Slobodan Milosevic anuló la autonomía de la provincia de Kosovo, provocando una reacción de acontecimientos que inflamaron la resistencia de los albanokosovares contra la autoridad de Belgrado y terminaron desencadenando la intervención militar de la OTAN. En junio de 1990, el presidente Milosevic se rinde y el ejército y las fuerzas de seguridad serbios se retiran de Kosovo. El territorio en disputa se convierte de hecho en un protectorado internacional encabezado por Estados Unidos, con el consentimiento del Consejo de Seguridad de la ONU, que aprueba el despliegue de tropas y personal civil en Kosovo. La presencia militar queda a cargo de la KFOR (Kosovo Force) de la OTAN, y la civil se encuadra en la UNMIK (United Nations Mission in Kosovo), la OSCE y la UE. PROTECTORADO La nueva situación, impulsada por una ingente ayuda económica y el envío masivo de funcionarios internacionales bajo la cobertura armada de la OTAN, restablece la calma en Kosovo, aunque con ocasionales estallidos de violencia. Se va creando paulatinamente una administración civil albanokosovar en la que adquieren un papel principal los dirigentes del ELK, transformado en Partido Democrático de Kosovo (PDK), que cuenta con el apoyo de Washington y Bruselas y es partidario de la independencia sin cortapisas. La mayor parte de la población serbia abandona definitivamente Kosovo, aunque continúa siendo mayoritaria en una pequeña franja al norte del país, fronteriza con Serbia, y en algunos enclaves dispersos del interior rodeados por los albanokosovares. Poco a poco, gracias al apoyo exterior, Kosovo se va recuperando de las heridas de la guerra, pero el problema de fondo que representa su estatus político queda sin resolver. En el año 2005 la ONU designa como mediador Junio 2015 Revista Española de Defensa 57
REVISTA ESPAÑOLA DE DEFENSA Nº 318
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