Adiestramiento ANFIBIO Más de 3.000 militares de cuatro países participan en el ejercicio (BRIMAR) que tiene su sede en San Fernando (Cádiz), a los que se añadieron medios aéreos de la Flotilla de Aeronaves, como los aviones AV-8B Harrier, helicópteros SH-3D Sea King, Hughes 500 y AB-212, y el sistema aéreo no tripulado Scan Eagle. SUPUESTO TÁCTICO De carácter anual, los ejercicios Gruflex buscan mantener y ampliar el nivel de adiestramiento de las distintas unidades y Estados Mayores empleando un escenario ficticio en el que se planea y ejecuta una operación de respuesta a crisis en áreas complejas con amenazas híbridas. La situación planteada en esta edición fue el despliegue de una fuerza conjunta-combinada para responder al terrorismo en un país llamado Larnland. La inestabilidad causada por los desórdenes políticos y criminales desencadena una guerra interna. Ante ello, el Consejo de Seguridad de la ONU emite una resolución para estabilizar el país, reforzar los Derechos Humanos y garantizar los bienes y propiedades de la población. Una fuerza naval y anfibia ha de encargarse BUQUES anfibios, fragatas, cazaminas, aeronaves y efectivos de Infantería de Marina se adiestraron entre los días 11 y 23 de noviembre en el ejercicio avanzado anfibio Gruflex 18, organizado por la Armada española en las islas Canarias y el Golfo de Cádiz. En total, la Armada movilizó a unos 3.100 militares. Además participó un importante contingente de la Marine Militare —coincidiendo con el 20º aniversario de la creación de la fuerza hispano-italiana—, una compañía de Fuzileiros de Marinha portugueses y una sección de Marines norteamericanos de la unidad de respuesta de crisis desplegada en la base aérea de Morón. Con estas maniobras, las más importantes del año, las unidades de la Armada se adiestran en operaciones anfibias para mantener la capacidad de proyección de una fuerza en tierra desde la mar, misiones de ayuda humanitaria y respuesta a situaciones de crisis. En esta ocasión han intervenido las unidades del Grupo Anfibio y de Proyección: los buques de asalto anfibio Juan Carlos I y Galicia y ocho Gruflex 18 lanchas de desembarco del Grupo Naval de Playa. Italia aportó el buque de desembarco San Giusto, que llevaba a bordo un batallón reforzado de la Brigada San Marco y dos helicópteros. La fuerza tenía como escoltas a las fragatas españolas Álvaro de Bazán, Almirante Juan de Borbón y Santa María, así como, en aguas del Golfo de Cádiz, el submarino Mistral y los cazaminas Duero y Tajo, de la Escuadrilla de Medidas Contra Minas. La fuerza anfibia, junto a la citada Brigada San Marco, estuvo principalmente formada por efectivos de la Brigada de Infantería de Marina Canarias y Cádiz, escenarios de las maniobras navales más importantes del año Diciembre 2018 Revista Española de Defensa 41
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